Al menos dos personas han muerto y varias han resultado gravemente heridas en un atropello masivo en la ciudad alemana de Mannheim, en el tercer suceso de este tipo en menos de tres meses. La Policía ha detenido a un hombre de unos 40 años, alemán, como autor de los hechos. Al parecer ha actuado solo.
Unos minutos después de mediodía, un vehículo entró en la zona peatonal de esta ciudad del suroeste de Alemania y atropelló a un grupo de personas. Como resultado de este suceso, además de los dos fallecidos, hay unas 25 personas heridas, 15 de ellas de gravedad.
Este suceso se produce después de otros dos recientes en Alemania: el 13 de febrero, que causó dos muertos en Múnich (sur), y el 20 de diciembre, cuando otras seis personas fallecieron en un atropello masivo en un mercadillo navideño de Magdeburgo (este).
El pasado 13 de febrero, un conductor arremetió en el centro de Múnich contra los viandantes provocando 39 heridos, entre ellas una madre y una hija, que murieron dos días después en el hospital a causa de las heridas. El autor, un ciudadano afgano de 24 años que fue detenido en el momento, reconoció en el interrogatorio que había embestido de forma deliberada contra la manifestación de empleados públicos convocada por el sindicato Verdi y adujo para ello una "explicación religiosa".
El primer ministro de Baviera, Markus Söder, dijo ante los medios que "presumiblemente se trata de un atentado" y la Fiscalía lo investiga bajo la sospecha de una posible motivación islamista. En el primero de los atropellos masivos, el suceso de Magdeburgo, murieron un niño de nueve años y cinco mujeres, mientras otras 299 personas resultaron heridas.
El autor del atropello, Taleb Al-Abdulmohsen, que fue detenido inmediatamente, era un ciudadano saudí que vivía desde 2006 en el estado federado de Sajonia-Anhalt y ejercía como médico. Al día siguiente, las autoridades calificaron el suceso de atentado, aunque sin determinar si se trataba de terrorismo.