La deuda que Petróleos Mexicanos (Pemex) mantiene con sus proveedores y contratistas se incrementó 37.4 por ciento anual en 2024 y fue el saldo más alto en 13 años.
De acuerdo con un análisis realizado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), con datos del reporte financiero de la compañía petrolera, durante el año pasado se alcanzó una deuda por 506.2 mil millones de pesos, contra los 368.3 mil millones que registró al cierre de 2023.
Según el reporte "Pemex en la mira. Resultados al cuarto trimestre de 2024" publicado hoy, se trata del saldo de deuda de Pemex con sus proveedores y contratistas con el nivel más alto de los últimos 13 años.
Desde el último trimestre de 2024, y hasta la fecha, la petrolera del Estado registró una situación crítica con diversas compañías que le realizan servicios.
Desde huelgas de trabajadores, paros o suspensión de actividades, recorte de labores, incapacidad de suministros, entre otras acciones, han generado mayores retrasos en las operaciones de la compañía.
Durante el sexenio del ex presidente, Andrés Manuel López Obrador, la deuda a proveedores y contratistas de Pemex evolucionó de manera significativa, pues durante 2019 el primer año del sexenio, la cifra ascendía a 184.8 mil millones de pesos, lo que implicó un aumento del 173.9 por ciento si se considera el saldo final al cierre de su último año de Administración.
El reporte también señala que la deuda financiera bruta de Pemex, la cual al cierre del 2024 ascendió a 1.98 billones de pesos, equivale al 5.8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del País estimado para el mismo año.
Además, es 10.3 por ciento mayor a la registrada al cierre del 2023, cuando se alcanzaron los 1.79 billones de pesos.
