San Luis Potosí, SLP.- Familiares de dos bebés recién nacidos denunciaron al hospital privado Noyola por presunta negligencia médica y falta de higiene en sus instrumentos, luego de que ambas pequeñas fueran diagnosticadas con una grave infección bacteriana tras su nacimiento.
Las niñas nacieron el pasado sábado con una hora de diferencia: una a las 10:00 de la mañana y la otra a las 11:00. Sin embargo, de acuerdo con los testimonios de los padres, en lugar de solicitar a las madres que las alimentaron con leche materna, el personal del hospital decidió administrarles fórmula sin informar qué tipo de alimento les estaban proporcionando.
Desde la primera toma, las bebés rechazaron la leche, lo que inicialmente se pensó que era un simple caso de reflujo. No obstante, durante la madrugada del domingo, ambas comenzaron a evacuar sangre, lo que llevó al personal médico a colocarles una sonda desde la garganta hasta el estómago. Más tarde, se les realizaron estudios que revelaron una infección por ácido gástrico, motivo por el cual fueron dejadas en ayuno total durante 24 horas.
Pese a la gravedad del caso, el hospital Noyola intentó deslindarse de la situación al asegurar que la infección había sido transmitida por las propias madres. Sin embargo, los familiares refutaron esta versión, señalando que resulta poco probable que dos mujeres distintas, con embarazos y condiciones diferentes, desarrollaran exactamente la misma infección en el mismo hospital y el mismo día.
“Nos dicen que la infección se la pasamos nosotras, pero es demasiada coincidencia que nuestras hijas tengan exactamente el mismo problema después de haber estado en este hospital. No queremos que se laven las manos, queremos que se hagan responsables”, expresó una de las madres afectadas.
Ante la gravedad del estado de salud de las bebés, este lunes 24 de febrero el personal del hospital solicitó a los padres llevar una leche especial sin lactosa, Nutramigen, y les pidió retirarse del área, asegurando que los mantendrían informados por vía telefónica. Sin embargo, los padres no recibieron noticias hasta la mañana de este martes, cuando les informaron que las pequeñas continuaban evacuando sangre.
A pesar del deterioro en la salud de las recién nacidas, el hospital Noyola se negó a seguir atendiéndolas y pidió a los padres que las trasladaran a otro centro médico por su cuenta. No obstante, cuando los familiares buscaron apoyo en hospitales públicos como el Central y o el Seguro Social de Zapata, recibieron la respuesta de que no había cupo para recibirlas.
“Nos dicen que ya no pueden hacer nada por ellas, pero tampoco nos ayudan a trasladarlas. No nos quieren dar información clara sobre la infección, no nos apoyan con una ambulancia y ni siquiera nos quieren entregar a nuestras hijas. Estamos desesperados”, denunció uno de los padres.
Incluso, una de las bebés ya requiere una transfusión de plaquetas por lo que sus familiares lograron gestionar su traslado a otro hospital privado. No obstante, en el nuevo centro de salud recibiría exactamente el mismo tratamiento, solo con un aumento en la dosis de antibiótico, lo que ha generado aún más indignación entre los afectados.
Los testimonios afirman que el personal del hospital Noyola ha mostrado una actitud hostil hacia los familiares, negándose a brindar más información y cerrándoles las puertas.
“Nos trataron con groserías y simplemente nos ignoraron. Están jugando con la vida de nuestras hijas”, lamentó una de las madres.
Los familiares de las bebés afectadas se mantienen a las afueras del hospital exigiendo respuestas y una pronta solución a este caso, el cual consideran un claro ejemplo de negligencia médica.
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