Un riesgo que no podemos ignorar
Estimadas amigas y amigos de plano informativo,el anuncio de nuevos aranceles por parte del gobierno de Estados Unidos a productos mexicanos ha generado preocupación en sectores clave de la economía nacional, especialmente en San Luis Potosí, donde el impacto podría ser considerable debido a la fuerte presencia del sector automotriz en nuestro estado. Esta industria, que ha sido el motor del crecimiento económico de la entidad, basa su modelo en la exportación, principalmente hacia el mercado estadounidense, por lo que cualquier barrera comercial impuesta afecta no solo a las grandes ensambladoras, sino también a toda la cadena de valor que las rodea, desde los proveedores de autopartes hasta los sectores de transporte y logística, generando consecuencias directas en el empleo y la economía del estado.
Con la llegada de empresas como BMW y General Motors, San Luis Potosí ha desarrollado una economía industrial centrada en el sector automotriz, creando un ecosistema productivo que involucra a cientos de proveedores y sostiene miles de empleos, lo que ha posicionado al estado como un referente en manufactura, pero al mismo tiempo lo ha hecho más vulnerable a las decisiones comerciales internacionales. Más del 90% de los vehículos y autopartes producidos en la entidad tienen como destino Estados Unidos, por lo que cualquier modificación en las reglas comerciales bilaterales repercute directamente en los costos de producción, afectando la competitividad frente a otras regiones y comprometiendo la estabilidad de las empresas locales.
La imposición de aranceles no solo incrementaría los costos para las ensambladoras, sino que también provocaría un efecto en cascada a lo largo de toda la red de proveedores y prestadores de servicios relacionados, obligando a muchas empresas a reconsiderar sus operaciones y, en algunos casos, a desacelerar la inversión, lo que impactaría negativamente la generación de nuevos empleos y la dinámica económica del estado. Aunque la dependencia del mercado estadounidense no es un problema reciente, las tensiones comerciales actuales lo hacen aún más evidente, y aunque tratados como el T-MEC han permitido mantener un flujo relativamente estable de comercio, la incertidumbre política en Washington sigue siendo un factor que puede modificar las reglas sin previo aviso, dejando a economías como la potosina en una posición expuesta a riesgos externos.
En este contexto, las negociaciones entre el Gobierno de México y Estados Unidos serán clave para intentar frenar la aplicación de estos aranceles y proteger la integración comercial entre ambos países, especialmente en sectores estratégicos como el automotriz, pero si los esfuerzos diplomáticos no logran revertir la medida, será indispensable que tanto el gobierno federal como el estatal adopten acciones claras y efectivas para mitigar los efectos negativos, lo que implica respaldar a las empresas afectadas, proteger los empleos existentes y fomentar nuevas oportunidades de inversión que fortalezcan la economía local.
Y aunque el impacto de los aranceles no será inmediato ni uniforme, ya que algunas empresas podrían absorber los costos en el corto plazo, otras enfrentarán mayores dificultades para sostener sus operaciones, lo que podría obligarlas a hacer ajustes significativos, afectando la producción y el empleo. Esta situación evidencia la urgencia de que San Luis Potosí enfrente el reto de su alta dependencia del mercado estadounidense, un desafío complejo considerando la estructura actual de su economía y la importancia que tiene el sector automotriz en la generación de empleo y desarrollo regional.
Hoy el principal reto no es solo mitigar los efectos inmediatos de los posibles aranceles, sino también encontrar soluciones que permitan al estado afrontar escenarios externos adversos sin comprometer su estabilidad económica. Aunque las decisiones que se tomen fuera del país seguirán influyendo directamente en la economía local, la capacidad de reacción y adaptación será clave para reducir los riesgos y mantener la actividad productiva en condiciones viables. El camino no es sencillo, pero reconocer las vulnerabilidades actuales es el primer paso para enfrentar de mejor manera los desafíos que ya están sobre la mesa.
De corazón, gracias por su lectura.
Facebook: AranzaPuenteSLP Instagram: @AranzaPuenteslp