San Luis Potosí, SLP.- San Luis Potosí enfrenta un panorama incierto en la industria panificadora debido al constante incremento en los costos de insumos importados. Olivia Calderón, delegada estatal de la Cámara Nacional de la Industria Panificadora (Canainpa), advirtió que las panaderías familiares son las más afectadas, ya que deben absorber los aumentos sin trasladarlos de inmediato al consumidor, lo que compromete su rentabilidad y permanencia en el mercado.
“Todo lo que está pasando a nivel internacional nos genera mucha incertidumbre. Hasta ahora no hemos aumentado el precio de ningún pan: donas, conchas y otros productos siguen al mismo costo. Sin embargo, fabricar pan es cada vez más costoso porque la mayoría de los insumos son importados. Harinas, cremas para batir, algunas mantequillas y la zafra del azúcar, aunque se produce en México, dependen de factores externos que pueden afectar la producción”, explicó Calderón.
Uno de los principales desafíos que enfrentan las panaderías locales es la constante fluctuación en los precios de sus insumos.
“Cada año vemos aumentos hasta tres veces en los costos de producción, lo que impacta más a las panaderías familiares porque no tienen un capital que les ayude a solventar esos gastos. Tú vendes a un precio, pero cuando te llega la factura, el insumo ya subió. No puedes trasladar el mismo porcentaje de incremento que aplica un proveedor porque si el precio sube demasiado, la gente deja de comprar”, detalló la delegada de Canainpa.
Además, Calderón denunció la competencia desleal que enfrentan los negocios establecidos ante el comercio informal, al señalar que no es lo mismo ser una empresa establecida y pagar impuestos que competir contra quienes no lo hacen.
“Si sacas cuentas, te das cuenta de que ellos ganan mucho más porque no tienen esa carga fiscal, lo que afecta aún más a quienes tratamos de administrar un negocio familiar y local de manera legal”, puntualizó.
A pesar de la incertidumbre y los desafíos económicos, las panaderías locales buscan mantenerse a flote sin afectar demasiado al consumidor. Sin embargo, la falta de apoyo y la dependencia de insumos importados podrían llevar al cierre de más negocios si la situación continúa deteriorándose.