San Luis Potosí, SLP.- Los baños de las escuelas de nivel básico y medio superior se han convertido en un punto crítico para la violencia escolar y el bullying, donde alumnos han sido víctimas de agresiones que van desde el acoso verbal hasta ataques físicos con tortura. Dos casos recientes ocurridos en San Luis Potosí han encendido las alarmas sobre la necesidad urgente de reforzar la seguridad en estos espacios.
Uno de los episodios más graves tuvo lugar en el plantel 26 del Colegio de Bachilleres (Cobach), el último día de clases antes de las vacaciones de invierno. En los baños de la escuela, un alumno fue víctima de una agresión violenta por parte de sus compañeros. La situación fue tan grave que las autoridades del Cobach tuvieron que intervenir directamente, pues el director del plantel no tomó medidas de inmediato.
“El caso más severo que hemos tenido en este momento”, señaló el director general del Cobach, Ricardo Daniel Centeno Trejo, al informar que el director de la escuela fue removido de su cargo por su omisión, el alumno afectado recibió apoyo y seguridad, y el agresor fue separado del plantel.
Otro caso de extrema violencia escolar se registró en una telesecundaria de Rioverde, donde un grupo de estudiantes llevó el acoso a niveles alarmantes. En los baños del plantel, un alumno fue sometido a actos de tortura y maltrato mientras sus agresores se hacían pasar por sicarios. Este hecho generó indignación y preocupación entre padres de familia, docentes y autoridades educativas, pues evidencia el nivel de violencia al que pueden llegar los alumnos dentro de las propias instalaciones escolares.
Cabe destacar que el problema no es nuevo, ya que en diversas instituciones educativas, los baños han sido identificados como puntos vulnerables donde ocurren casos de bullying, peleas y hasta consumo de sustancias ilícitas. Al ser espacios sin vigilancia constante, los agresores encuentran el escenario perfecto para llevar a cabo sus actos sin ser detectados de inmediato.
Ante esta problemática, el director general del Cobach señaló que se están tomando medidas para prevenir y reducir el bullying en los planteles: “Buscamos la prevención trabajando con la Secretaría de Seguridad Pública, para que lleven pláticas sobre lo que es el bullying e ir reduciéndolo.
Cuando ya se presenta un caso, el primero en reaccionar debe ser el director del plantel, y si la situación no es grave, se puede llegar a un acuerdo.
Pero cuando es una situación grave, sí se toman medidas, siendo la sanción más grande la separación del alumno del plantel”, explicó Centeno Trejo.
Estos recientes casos de violencia en los baños escolares han puesto en evidencia la necesidad de implementar estrategias más efectivas para garantizar la seguridad de los estudiantes.
La violencia escolar sigue siendo un problema latente y, sin acciones contundentes, los baños de las escuelas seguirán siendo un foco rojo para el acoso y la agresión entre alumnos.