Una revisión temprana del T-MEC, centrada en hacer cumplir las reglas de origen, estaría más en línea con la idea del presidente Donald Trump de impedir que las empresas chinas eludan las restricciones comerciales a través de México o Canadá, señaló Barclays en un análisis.
La correduría británica consideró que la administración Trump no impondrá aranceles específicos a México el 1 de febrero, ya que las cadenas de suministro están altamente integradas y los incentivos de la presidenta Claudia Sheinbaum están alineados con los de Trump.
En cambio, "creemos que Trump podría buscar una revisión temprana del T-MEC y esta sería una medida inteligente, dado que los aranceles no han sido efectivos en el pasado".
La firma indicó que se podrían incluir cuestiones de seguridad nacional en un tratado revisado.
El T-MEC establece que se puede realizar una revisión cada cinco años, por lo tanto, se podría empezar en julio de 2025 y tener listos los cambios para implementarse en julio de 2026, señaló Barclays.
Por otra parte, la correduría indicó que una consecuencia directa de la postura más suave de Trump sobre la política comercial es que el Banco de México podrá aumentar el ritmo de recortes a 50 puntos básicos en su próxima reunión de política monetaria el 6 de febrero.
