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Los voladores de Tamaletón podrían ser más antiguos que los de Papantla

Ricardo Godina | Plano Informativo | 23/01/2025 | 17:48

San Luis Potosí, SLP.- La danza de los voladores es un ritual ancestral practicado por diversos pueblos mesoamericanos, incluyendo a los totonacos de Papantla, Veracruz, y a los teenek de Tamaletón en Tancanhuitz, San Luis Potosí. Determinar con exactitud cuál de las dos variantes es más antigua es complejo debido a la naturaleza oral de las tradiciones y la escasez de registros escritos. Sin embargo, existen estudios que sugieren una notable antigüedad para ambas.

El investigador Javier Urcid señala que el ritual de los voladores se remonta al menos al año 600 a.C., es decir, tiene más de 2,500 años de antigüedad.

En el caso específico de los voladores de Tamaletón, algunas fuentes locales afirman que su ceremonia posee una antigüedad mayor que la de los voladores de Papantla. No obstante, es importante destacar que estas afirmaciones suelen basarse en tradiciones orales y pueden carecer de evidencia arqueológica o documental que las respalde de manera concluyente.

Por su parte, la ceremonia de los voladores de Papantla ha sido ampliamente estudiada y reconocida. El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) indica que este ritual tiene aproximadamente 1,500 años de antigüedad.  Además, en 2009, la UNESCO inscribió la ceremonia ritual de los voladores en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, reconociendo su importancia y valor cultural.

Aunque las afirmaciones sobre la antigüedad de los voladores de Tamaletón carecen de la validación arqueológica que respalda la tradición totonaca, su singularidad ha captado la atención de investigadores y defensores culturales.

El caso de los voladores de Tamaletón es un recordatorio de que San Luis Potosí tiene una oportunidad invaluable para posicionar a los voladores de la Huasteca como un atractivo turístico único, no solo por su riqueza cultural, sino también por la mística y profundidad espiritual que envuelve esta ceremonia. Promover esta tradición en festivales, ferias y campañas de difusión nacional e internacional podría contribuir significativamente a preservar el legado teenek y a atraer visitantes interesados en las raíces culturales de México.