Con Donald Trump al frente de la Presidencia de Estados Unidos en la próxima revisión al T-MEC, si decide no renovar el acuerdo, que finalizaría en el 2036, sus socios tienen más que perder, advirtió un análisis del Atlantic Council.
En el documento titulado "Trump tiene una ventaja en las próximas negociaciones comerciales del T-MEC. Así es como su equipo puede aprovecharla", el organismo estadounidense refirió que del 100 por ciento de las exportaciones de México y Canadá, el 80 y el 76 por ciento, respectivamente, van hacia Estados Unidos.
Tomando como año de referencia el 2023, el Atlantic Council mencionó que, en cambio, de las exportaciones que hace Estados Unidos sólo el 32 por ciento va hacia sus socios del T-MEC.
"Canadá y México dependen de la economía estadounidense mucho más de lo que Estados Unidos depende de cualquiera de ellos, aunque la relación es importante para los tres.
"La asimetría en este caso genera un mayor nivel de importancia política para el T-MEC dentro de México y Canadá. El empleo en México depende especialmente del comercio con Estados Unidos", destacó.
Señaló que cuando comience el proceso de revisiones en el 2025, la Presidenta mexicana Claudia Sheinbaum estará bajo presión por parte de sus ciudadanos para mantener relaciones comerciales favorables con Estados Unidos y Canadá.
El Atlantic Council indicó que las cartas están a favor de que Estados Unidos tenga la mano más pesada en las negociaciones, incluso sin la amenaza de aranceles más altos.
Aparte, en su documento "Trump y el futuro del T-MEC", el Council Foreign Relations anotó que el acuerdo comercial se revisará con líderes diferentes a los de la primera renegociación en Canadá y México, lo que complicará los acuerdos.
"Los cambios políticos internos en los tres países dificultarán la búsqueda de consensos. En Canadá, la agitación tras la reciente renuncia del Primer Ministro Justin Trudeau debilita la posición negociadora del país. Y como las elecciones están programadas para octubre, las conversaciones probablemente comenzarán con un Gobierno saliente.
"En México, las reformas constitucionales de Sheinbaum (en particular las que reestructuran los organismos judiciales y autónomos) se suman a las dificultades de negociación. Y a pesar de haber encabezado la aprobación del T-MEC durante su primer mandato, Trump no estará obligado a ser leal al acuerdo, sino que probablemente adoptará una línea dura para promover su propia agenda política".
Añadió que es muy probable que Estados Unidos examine las políticas energéticas en México centradas en el Estado.