NO TE RINDAS

¿Cuánto tiempo has caminado por esta tierra? ¿Te imaginas la inmensa sabiduría que sin notarlo conscientemente posees para compartir? Pero los demás no lo ven y no lo valoran. ¿Cierto? ¿Has pensado así? ¿Qué caso tiene seguir adelante, si no veo resultados de mis esfuerzos? ¿Qué caso tiene compartir mi amor, mi benevolencia, mis buenas intenciones y entregarme a los otros con confianza y gratitud, si cuando yo necesito volteo alrededor y nadie está? Pudiste pensar alguna vez. Bueno, querido(a) amigo(a), lo que sucede, es que es verdad que todo está en la mente.

Generalmente vivimos en el pasado y vemos el presente de acuerdo a esas experiencias dolorosas o decepcionantes y como nos es familiar ser decepcionados o no ser colmados en nuestras necesidades emocionales, creativas e incluso físicas, ya estamos predispuestos a que vuelva a ocurrir una y otra vez, fijados al obstáculo.

 Así funcionan las heridas. Sin embargo, eso puede cambiar en este instante. Podemos reprogramar nuestra mente y abrir la percepción a lo nuevo, a otras posibilidades más prósperas, llenas de amor y de belleza. Oye, ¿Te has dado cuenta de todas las situaciones adversas que has superado? ¡Y sigues aquí, leyendo esto! Estás interesado(a) en tu crecimiento interno aún, a pesar de todo eso que llevas en tu corazón como una melodía triste, que tal vez no has compartido con otro ser humano. Eres fuerte. De verdad eres valiente. No es fácil transitar este camino terrenal.

La pérdida inevitable, la maldad que subyace o descaradamente acciona en el planeta, nos deja ácidas heridas en el Alma. Es para héroes y heroínas hacer este camino y tú lo eres. Eres valiente.

Entonces, si estás cansado(a), descansa, pero no te abandones. Siempre hay un nuevo sol que entra por tu ventana, un abrazo Divino que te espera si así lo pides, un consuelo amoroso que está esperando a que lo tomes, otra vez con tu corazón abierto. Porque en este mundo hay ángeles, los hay por doquier, si abres tu visión los podrás encontrar diariamente. Te sonríen en cuerpos humanos, te dan lengüetazos en la cara cuando llegas a casa, vuelan cerca de tu cabeza con sus trinos, te purifican con el agua que tomas y la que te acaricia en la ducha como un dulce consuelo, lo sientes en tu corazón cuando amas.

 Tú mismo(a) eres uno de ellos para todos nosotros, cuando te conectas al cielo y tiendes una mano a otro Ser de cualquier especie o reino. Así que reclama tu herencia Divina. No dejes que la decepción te pare. Lo que hicieron los demás es su responsabilidad. No te mintieron, mienten. No te abandonaron, abandonan. No te engañaron, engañan. Es decir, si lo hicieron y tu confiaste, porque en tu corazón hay inocencia, pero tú no lo provocaste y hoy eres más Sabio(a) y la ingenuidad se ha esfumado como el humo de un incienso.

El discernimiento hoy, bendito regalo, te ayuda a entender, que la confianza no es un regalo, sino que un logro. Ahora creas un cielo en la tierra, te cuidas, te nutres, te maternas, te paternas, te amas, te haces feliz y entonces puedes compartir con otros tus bendiciones. Se fiel a ti mismo(a), persevera, porque has resistido. Tus sueños están allí, al lado de tu cama, por las noches, esperando pacientes a nacer en el mundo. Deja que salgan tus miedos para que ellos entren en acción. Aunque no tengas ganas, aunque posiblemente estés bajo(a) de energía. Verás que poco a poco, eso que anhelas va tomando forma, porque te lo mereces. Y deja que hablen y envenenen, difamen, critiquen, se agrupen o te critiquen. Nada de eso tiene que ver contigo, sino que con Almas desconectadas de la luz.

Piensa, ¿A qué dedicas tu energía, tus pensamientos? No desgastes tu valioso equipaje energético en quedarte sufriendo por la mala intención ajena. Tu luz merece ser proyectada hacia ese punto frente a ti que es el logro de aquello que te hace brillar la mirada y sonreír como un niño(a). Tu Alma está clamando, ¡Escúchala!  Deja atrás lo que no es esencial, deja atrás al infierno de los egos. ¿Qué es aquello que quieres crear para bendecir al mundo en el que habitas? No te rindas minutos antes de alcanzar tu sueño tan preciado. Nunca es tarde querido(a) amigo(a). La edad es un número. 

Aprovecha los vaivenes para tomar impulso hacia adelante. Y si miras hacia atrás que sea para resolver lo que quedó enredado, pero después con toda la fe, asentarte en el presente. El dulce, maravilloso y poderoso presente, que es en dónde creas las siguientes manifestaciones. Permítete llorar, expresar, resolver, perdonar y perdonarte, pero levántate y respira el Amor que siempre has sido, sigue por el sendero que te lleva a tu realización.  Cada segundo que pasa es una nueva oportunidad para cambiar los aires del tiempo.

No te rindas. Tus sueños pueden hacerse realidad. No escuches a la voz del ego que te dice todo lo contrario, simplemente obsérvala y respira. Hazle saber que, con el discernimiento, la sabiduría y el amor puedes transitar nuevos caminos de oportunidad, en donde danzar el ritmo de tu Espíritu sin desavenencias, porque ahora eres mucho más sabio(a) y tienes detrás de ti a todo tu clan, tu árbol genealógico respaldándote con amor, para que tú lo consigas. Mansedumbre, paz, éxito, realización, amor y prosperidad. No te rindas. Desempolva tu casa, tu cuerpo y tu mente. Llena de aromas tu vida y persevera. Siempre hay una mano que te ayuda a levantarte, una voz que acaricia a tú Ser y un valiente guerrero que protege tus espaldas. Mereces lo bueno, lo bello y lo verdadero. La vida te está esperando.

Gracias por caminar juntos.

Tu terapeuta