Deportados van a necesitar otro tipo de servicios
Jesús Javier Peña Muñoz, miembro del Colegio de la Frontera Norte, el reto mayor tanto para los gobiernos como para las instituciones y los activistas, es “Identificar muy bien los perfiles sociodemográficos de las personas que podrían ser deportadas, y en relación a eso, ver qué servicios de apoyo son los que necesitan, porque va más allá del albergue, casa del inmigrante para quedarse tres, cuatro días, el boleto de camión para que se regrese, salga de la frontera y se vaya a su lugar de origen, estas personas van a necesitar otro tipo de servicios, y ese es el reto principal que yo creo que no tenemos bien identificado, y por lo tanto, tampoco está bien desarrollado”.
El investigador señaló la problemática de ofrecer ayuda a estas personas deportadas, porque “muchas de ellas dicen ‘Yo llevaba 10 años en Estados Unidos sin regresar a México’, ‘Yo llevo hasta 20 años sin regresar y pues nunca me pude regularizar en Estados Unidos, ya tengo dos hijos, allá están mi esposa, yo ya tengo cierto patrimonio, y todo eso lo perdí por la deportación’”.
Y agregó que “Entonces esa es la clave, tenemos que estar muy atentos de cómo podemos ayudar a estas personas en relación a su situación en Estados Unidos, tanto familiar como patrimonial”.
Inserción laboral, el otro problema
Peña Muñoz consideró que otro gran problema es “La inserción laboral, que es uno de los temas que siempre ha estado ahí cuando hablamos de personas deportadas, pues la inserción laboral es algo que llevamos décadas trabajando, investigando, viendo cómo mejorarlo, por ejemplo, de gente que pueden usar su inglés, eso siempre ha sido un tema que ha estado ahí y se han hecho cosas buenas, pero se han quedado incompletas”.
Puso como ejemplo, insertarlos en la industria maquiladora, “que es lo más hay aquí en la frontera, es algo que se tiene que seguir trabajando, pero ya hay avances en eso, aunque no son suficientes, pero sí es algo que se ha trabajado con el tiempo”.
El investigador consideró que hay que determinar “Qué tipo de inserción laboral y residencial tendrían estas personas, para mí, yo siento que sería diferente que simplemente darles un trabajo aquí a la maquila, o en algún lugar, no sé, el call center, o algo así, no sé, porque estas personas, eso lo hemos visto recientemente, con este cambio de perfil, no tenemos claro qué es realmente lo que estas personas van a necesitar en México, lo que van a buscar, porque podemos organizar un programa de inserción laboral, y a lo mejor este programa no tome en cuenta la opinión y las necesidades reales de estas personas, o lo que necesitan, pues sí necesitan un trabajo en México, temporal, o por lo menos para el tipo de ingreso, pero tenemos que ver un poco más a largo plazo en estos programas laborales porque hay que tomar en cuenta también que sean de gobierno, o de sociedad, o del estilo de vida al que están acostumbrados, es todo un reto”.
Trump trae una agenda más establecida
Jesús Javier Peña dijo que “Lo que yo veo es que primero, Donald Trump ya trae una base más organizada y una agenda política mucho más establecida, donde también ya se ha rodeado de personas que vienen pensando esto desde hace unos años, que traen ya una agenda, un plan político para ahora sí, poder llevar a las leyes, a la realidad los discursos de Donald Trump”.
El investigador consideró que en este momento, “Lo primero es recordar que en 2016, durante la primera administración de Trump, donde traía un discurso similar, muy antiinmigrante, y especialmente enfocado en la población mexicana, desde la campaña traía ese discurso, y se hablaba de un retorno masivo de población mexicana, ya sea por deportación, o personas que se iban a regresar por su cuenta propia, porque el sentimiento antiinmigrante”.
Señaló que “Ahora ya sabemos que eso no sucedió, no hubo como tal tanto retorno, no hubo deportaciones masivas, ahora sabemos que en realidad Donald Trump no deportó mucha gente en su administración, en relación a su antecesor, Barack Obama y otras administraciones anteriores”.
Consideró, sin embargo, que ahora hay factores que hacen que sí sea diferente, “Y no voy a decir que simplemente Trump está diciendo lo que su base política quiere escuchar, porque ahora creo que sí hay algunos elementos diferentes en esta segunda administración de Trump, no como para considerar que van a regresar a millones de migrantes, pero sí para que haya unas políticas migratorias mucho más restrictivas”.