Agencia Reforma | 21/12/2024 | 09:33
El 11 de diciembre, la Cruz Verde Mario Rivas Souza atendió a un adolescente que sufrió la amputación parcial de los dedos, producto de un barreno que le explotó en la mano.
La víctima, de 13 años, también tuvo lesiones en la cara, según reportaron las autoridades.
Accidentes como este suceden particularmente en esta temporada, pese al conocimiento que existe en la sociedad sobre los riesgos y consecuencias de manipular la pólvora, y por ello las autoridades reiteraron extremar precauciones.
De acuerdo con personal de Protección Civil y Bomberos de Guadalajara, la oferta y circulación de pirotecnia en las calles aumenta ante la celebración de las fiestas decembrinas, como lo son las posadas, la Nochebuena y el Año Nuevo.
"Está aquella que son explosivos que tienen una carga bastante grande y pueden generar lesiones a los niños, sobre todo a los niños menores que las consumen y que las utilizan sin supervisión", informó el director general de la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos, Sergio Ramírez López.
"Por otro lado tenemos los proyectiles, los que salen proyectados y que pueden generar incendios igual que las luces, que aparentan ser inofensivas, pero que también tienen la capacidad de generar un incendio".
Ramírez López sostuvo que la frecuencia de incendios se incrementa un 15 por ciento en la temporada navideña y se da principalmente por el uso de la pirotecnia y por los cortocircuitos.
Para reducir los riesgos, las autoridades exhortaron a las personas a evitar almacenar pólvora en casa, vehículos o mochilas, y a no transportar o guardar artefactos explosivos en los bolsillos, y a mantenerlos alejados de fuentes de calor.
La pirotecnia no sólo puede generar quemaduras o amputaciones, sino incendios en el hogar o la vía pública.
Las consecuencias de prender un cohete y lanzarlo al aire, ha advertido el Gobierno federal, va más allá de una explosión multicolor solamente. En el aire estos artefactos liberan monóxido de carbono y partículas que, junto a otras fuentes de emisión como las fogatas, la quema de basura, llantas o leña generan una alta contaminación en las ciudades en estas fechas.
Estos contaminantes tienen graves consecuencias en la salud. Las partículas PM 2.5, por ejemplo, entran directamente al sistema respiratorio y pueden causar súbitos malestares o una crisis en pacientes vulnerables, como los asmáticos o personas con enfermedades cardiovasculares.