La purificación del autoexilio

CUANDO EL AUTOEXILIO SE convierte en el nuevo lavado de culpas. Es curioso observar cómo el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en México y, particularmente, en San Luis Potosí, está atravesando una verdadera desbandada.

UNO A UNO, LOS MIEMBROS DE esta otrora poderosa fuerza política van abandonando sus filas, buscando refugio en otras agrupaciones. ¿Será acaso que el tan ansiado "autoexilio" se ha convertido en la nueva forma de purificación de los pecados del pasado?

EL ÚLTIMO EJEMPLO QUE conocemos es el del ex diputado y también ex secretario general de gobierno con Juan Manuel Carreras, Alejandro Leal Tobías, que dicen que busca la redención en el Partido Verde Ecologista de México.

A PESAR DE LOS CONSTANTES señalamientos de corrupción que han perseguido al PRI durante décadas, parece que aquellos que deciden huir de sus filas logran, de alguna manera, lavar sus culpas. Es como si, al alejarse de la organización, pudieran desprenderse de todas las manchas que han empañado su reputación a lo largo de los años.

UNA ESPECIE DE LIMPIEZA espiritual que les permite renacer en otras agrupaciones, con la esperanza de que sus nuevos compañeros olviden o ignoren sus turbios antecedentes.

EL ÚLTIMO DEL QUE SABEMOS apenas hace algunos días es del connotado político Enrique de la Madrid, quien fuera Secretario de Turismo con el entonces presidente Enrique Peña Nieto, tras 43 años de militancia deja este partido para buscar contribuir desde otra perspectiva dice, pero sin duda deja entrever lo que podría ser la intención de generar otra alternativa política.

RESULTA CURIOSO CÓMO EL PRI, en su desesperada búsqueda por mantener el control, parece estar fomentando esta suerte de "autoexilio purificador".

TAL VEZ, EN SU AFÁN POR deshacerse de los elementos más cuestionados, ¿será? les está brindando una salida dorada, una oportunidad para que se laven las manos y se presenten ante el mundo como nuevos y renovados líderes políticos, o en otra singularidad poniéndole los clavos al ataúd. Una estrategia que, sin duda, levanta más de una ceja entre los observadores atentos.

EN DEFINITIVA, LA DESBANDADA del PRI en México y San Luis Potosí es un fenómeno que merece ser observado con detenimiento. ¿Será que esta supuesta "purificación" a través del autoexilio es realmente una forma de escapar de la justicia y de las consecuencias de los actos del pasado?

O, POR EL CONTRARIO, ¿SE TRATA de una estrategia deliberada del partido para deshacerse de los elementos más problemáticos y reconstruir su imagen? Sea cual sea la respuesta, una cosa es segura: el PRI se encuentra en un momento crucial de su historia, y las decisiones que tome en los próximos meses marcarán su futuro.

¿USTED QUÉ CREE? UN CAMINO a la redención es quemar las naves para no volver.

HASTA LA PRÓXIMA.