Japón instó este jueves a China a reforzar la seguridad de sus ciudadanos residentes y visitantes en ese país, especialmente en el contexto del aniversario de la Masacre de Nanjing, fecha históricamente sensible para Pekín, que conmemora uno de los episodios más oscuros de la Segunda Guerra Mundial.
La Embajada de Japón en China emitió un comunicado en el que advirtió a los ciudadanos japoneses sobre el aumento de sentimientos antijaponeses en días conmemorativos como este, tras una serie de ataques recientes contra ciudadanos nipones, incluidos menores.
En su mensaje, en el que el organismo específicamente menciona la fecha del 13 de diciembre, la Embajada subrayó la necesidad de «extremar las precauciones, evitar comportamientos llamativos y ser discretos en lugares públicos».
El aniversario de la Masacre de Nanjing recuerda los crímenes cometidos entre diciembre de 1937 y enero de 1938, cuando las tropas japonesas ocuparon la ciudad china del mismo nombre, causando la muerte de cientos de miles de civiles y soldados desarmados.
Pekín sostiene que las víctimas superaron las 300.000, mientras que las cifras oficiales japonesas son considerablemente menores, lo que ha generado tensiones históricas y controversia.
Entre las medidas preventivas recomendadas, Japón ha solicitado a las autoridades chinas proteger escuelas, negocios y lugares vinculados a su comunidad.
También se han suspendido temporalmente las clases en varias instituciones japonesas en China, optando por modalidades en línea para garantizar la seguridad, informó la agencia nipona Kyodo.
El comunicado de la Embajada también enfatiza la importancia de “respetar las costumbres locales”, “moderar el lenguaje y comportamiento en público”, “evitar vestir ropa o portar objetos que identifiquen como japoneses”, “mantenerse alerta en lugares concurridos” y “alejarse inmediatamente de individuos o grupos sospechosos”.
«En días relacionados con eventos históricos entre China y Japón, es necesario extremar las precauciones. Es fundamental estar más alerta que nunca en cuanto a la seguridad al salir», señaló el texto.
La advertencia por parte de Japón a sus ciudadanos se produce tras incidentes violentos registrados este año en el gigante asiático.
En junio, una mujer japonesa y su hija fueron apuñaladas en Suzhou (este), en un incidente en el que falleció una ciudadana china que intentó defenderlas, mientras que en septiembre un niño japonés fue asesinado en Shenzhen (sur), durante el aniversario del Incidente de Mukden, un atentado a trenes japoneses provocado por Tokio en 1931 como excusa para defender su invasión.