Juristas expertos en derechos humanos de Naciones Unidas denunciaron este miércoles la forma en que Israel está violando el derecho humanitario internacional haciendo una "interpretación extrema y excepcional" del mismo, al tiempo que goza de una impunidad total en medio de la "parálisis" de una comunidad internacional que le ha permitido actuar como hace.
"Impunidad es la palabra clave para entender la escalada del genocidio que perpetra Israel, que nunca se ha sometido a los mismos estándares que la mayoría de miembros de la comunidad internacional... Nunca se han dictado sanciones contra Israel y las relaciones diplomáticas y comerciales siguen intactas", dijo la relatora de la ONU para los territorios palestinos ocupados, Francesca Albanese.
Sostuvo que los gobiernos con influencia parecen paralizados y que muchos de ellos dan muestras de "haber normalizado la ocupación y la represión del pueblo palestino".
En una conferencia de prensa en Ginebra, tras haberse cumplido catorce meses del conflicto en Gaza -con un saldo hasta ahora de más de 44.000 muertos, más de 100.000 heridos y miles de desaparecidos-, Albanese reclamó que cese la transferencia directa o indirecta de armas a Israel y que se revise su participación como miembro de Naciones Unidas.
El relator de la ONU sobre los derechos humanos en la lucha contra el terrorismo, Ben Saul, un jurista internacionalmente reconocido y profesor en prestigiosas universidades, afirmó que la estrategia de Israel ha sido hacer "interpretaciones extremas y excepcionales del derecho humanitario internacional para dar una especie de manto de legalidad a lo que están haciendo" en Gaza y otros países que considera sus enemigos.
"Han ampliado la definición de lo que es un objetivo militar, de la categoría de personas a las que llaman combatientes y que pueden ser atacadas, ponen cifras muy elevadas de víctimas civiles que pueden atacar y han usado la inteligencia artificial para eludir las precauciones habituales que deben tomarse antes de lanzar ataques", explicó.
Además, Israel "ha eliminado el control judicial efectivo o el acceso a abogados durante periodos muy prolongados, ha autorizado controles sobre la distribución de ayuda humanitaria que no son tolerados en una interpretación correcta del derecho humanitario y ha autorizado el desplazamiento de civiles de una manera que se sale de la norma".
"Esto es algo que se está expandiendo, una especie de contagio que va mucho más allá de los territorios palestinos ocupados", dijo el relator al recordar los ataques que Israel ha perpetrado en el Líbano, en Irán y en Siria, antes y después de la caída del régimen de Bachar Al Asad.
"Esto es muy destructivo para el orden legal internacional", sentenció el experto, quien dijo que los Estados influyentes deben presionar al Gobierno de Benjamin Nethanyahu para que estas violaciones de las normas internacionales cesen.
"Alemania y Estados Unidos suministran el 99 % de las armas que se exportan a Israel, si ellos pararan de hacer esto el conflicto terminaría de la noche a la mañana", sostuvo.
La relatora de la ONU sobra la independencia de la judicatura, Margaret Satterhwaite, llamó a los Estados a cumplir con la orden de arresto emitida por la Corte Penal Internacional contra Nethanyahu porque en casos de crímenes internacionales la inmunidad no le protege.
Lamentó que en lugar de ello, desde varios países se hayan lanzado ataques y amenazas contra esa institución, contra su fiscal y otros funcionarios, en particular desde ciertos sectores políticos en Estados Unidos.
"El doble rasero debe acabarse", instó la jurista.