Pagos digitales y sin contacto serán clave para las fintech

Para las fintech, las transacciones instantáneas representan una ventaja competitiva. La evolución de la infraestructura del país, con una mayor presencia de Terminales Punto de Venta (TPVs), ha impulsado el uso de pagos digitales y sin contacto, además de tecnologías en seguridad como la tokenización y click to pay.

Según Alejandro Del Río, director regional para América Latina de la firma especializada en pagos, Paymentology, los pagos en tiempo real se fortalecerán gracias a alianzas estratégicas como la establecida entre la tecnológica Getnet de Santander y Visa y Mastercard.

Esta colaboración busca habilitar la aceptación de pagos con tarjetas bancarias dentro del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro.

Alianzas de este tipo, además de aumentar la infraestructura para la aceptación de pagos digitales, también impulsarán una competencia entre las tecnológicas financieras. Del Río explicó que esto fomentará que las financieras ofrezcan tanto tarjetas digitales como físicas habilitadas para pagos sin contacto.

“Lo más relevante que debe entender la industria de pagos es que los convenios, alianzas y socios comerciales pueden proporcionar una infraestructura tecnológica que permita acceder a mercados o nichos de mercado que antes no era posible”, señaló Del Río.

México está dando un paso adelante en el tema de la digitalización, especialmente en la aceptación de pagos sin contacto con tarjetas. Muchas empresas, incluso aquellas que ya ofrecían productos digitales, enfrentaban limitaciones porque los comercios no tenían habilitadas sus TPVs para realizar este tipo de operaciones”, añadió Del Río.

Destacó que la evolución de las TPVs, que suman 6.1 millones en todo el país, ha facilitado a los usuarios realizar pagos sin contacto, incluso a través de teléfonos móviles. Ante este panorama, las billeteras digitales y las fintech deben adaptarse e incorporar estos métodos de pago.

 Datos de Paymentology, estiman que el volumen global de pagos sin efectivo crecerá más de 80% entre el 2020 y el 2025, pasando de aproximadamente 1 billón de transacciones a casi 1.9 billones de operaciones, y esa cifra se triplicará para el 2030.