La líder ultraderechista francesa Marine Le Pen acusó al primer ministro, Michel Barnier, de rechazar el diálogo con su partido, Agrupación Nacional (RN) y anunció que votará a favor de una moción de censura para hacer caer a su gobierno el próximo miércoles.
"Le presenté nuestras líneas rojas y no ha querido aceptarlas. No podemos aceptar estos presupuestos profundamente injustos porque hacen pagar a los franceses la incompetencia de (el presidente francés, Emmanuel) Macron", dijo Le Pen tras anunciarse una moción de censura contra el Ejecutivo.
La líder de la extrema derecha, cuyos 140 diputados son fundamentales para la supervivencia del Ejecutivo, anunció que su grupo presentará su propia moción de censura, pero que están dispuestos también a votar la que anunció la izquierda.
Con esa posición, las horas del Ejecutivo de Barnier, nombrado el pasado 5 de septiembre, están contadas, pero Le Pen quitó gravedad al asunto: "Se aplicarán los presupuestos del año pasado, habrá un nuevo primer ministro y adoptará un nuevo presupuesto".
"Los franceses no tienen motivos para tener miedo. Lo único que deben temer son el elevado déficit del país y la subida del paro por culpa de las políticas de los últimos siete años", señaló.
Le Pen acusó a Barnier de querer seguir las políticas de Macron y minimizó las concesiones que el primer ministro les ha hecho en los últimos días en la negociación presupuestaria.
Además, criticó que no accediera a la última de ellas, la de renunciar a retrasar medio año la subida de las pensiones en 2025 para absorber la inflación de 2024.
Aseguró que su obligación es "defender a los franceses" frente a las medidas del Ejecutivo y consideró que Barnier no tuvo en cuenta sus propuestas sobre "recortes y nuevos ingresos".
Sobre la decisión de no dejar de subvencionar ciertos medicamentos, adoptada esta misma mañana por Barnier, Le Pen señaló que apenas supone 500 millones de euros.
Barnier cuenta solo con 211 diputados en una Asamblea de 577, lo que convierte en casi segura su destitución en la moción de censura, que en Francia no son constructivas, sino que simplemente tumban al Gobierno
Será Macron, que se encuentra en visita de Estado en Arabia Saudí hasta el miércoles, quien tenga que nombrar un nuevo Ejecutivo.