Agencia Reforma | 02/12/2024 | 11:36
Los casinos en México, y más aún en Nuevo León, tienen una sobrecarga fiscal que fomenta la clandestinidad, advirtió Miguel Ángel Ochoa Sánchez, presidente de la Asociación de Permisionarios, Operadores y Proveedores de la Industria del Entretenimiento y Juego de Apuesta en México (AIEJA).
"Tengo un criterio respecto al tema fiscal que no es es muy compatible con lo que piensan las autoridades locales, e incluso la Federación: a menos impuestos puede haber más recaudación, porque estimularía la inversión, aumentarían los empleos, la afluencia de personas a una sala y el número de salas", sostuvo.
"Hoy el tema fiscal es complicado porque nos cobra la Federación, nos cobran los estados y los municipios y esto hace que haya no una doble, sino hasta una triple tributación".
Indicó que los casinos pagan sobre sus ingresos 30 por ciento de Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) a la Federación y 2 por ciento de aprovechamientos a Gobernación, pero en Nuevo León el cobro es mayor.
En el Estado, dijo, hay un pago adicional de 15 por ciento en permisos y un impuesto municipal a las máquinas de juego.
Ochoa añadió que el 25 de noviembre Ricardo Monreal, presidente de la Cámara de Diputados, y Rosa Isela Rodríguez, Secretaria de Gobernación, expresaron su aval a una iniciativa de nueva Ley Federal de Juegos y Sorteos (la actual data de 1947), por lo que el gremio buscaría adecuar sus preceptos a las innovaciones que hay en esta actividad, los cuales hasta ahora no hay en los cambios que han tenido los reglamentos.
"No queremos negarnos a pagar, pero que sea con una ingeniería platicada con la autoridad, que aun cuando se llaman impuestos, éstos no sean imponibles, sino negociables y razonables, que traerían una recaudación mayor".
Consideró que otro aspecto a evaluar es el juego en línea, en el que 60 por cieno de las apuestas son ilegales.
"Muchas veces el juego en línea viene de países donde esa apuesta es legal, pero no lo es en México, viene de páginas fraudulentas en las que engañan al jugador, a la autoridad y a la recaudación, porque no pagan impuestos y son una competencia desleal para quienes cumplen la Ley".
Reveló que hay 423 salas abiertas en México y Nuevo León ocupa el segundo lugar, aunque en cantidad de máquinas es el número uno a nivel nacional.