El Instituto Nacional de Migración (INM) rechazó las versiones que señalan a la institución de engañar a grupos migrantes para frenar su llegada a la frontera con Estados Unidos, en medio de las advertencias del presidente electo, Donald Trump.
El Instituto aseguró que son las personas extranjeras quienes deciden abandonar su tránsito por caravana y por su seguridad aceptan el servicio de transporte que les ofrecen las autoridades migratorias para trasladarse a distintos puntos.
"El INM no ha recibido reclamos por parte de las personas extranjeras que han optado por esta ayuda, toda vez que al aceptarla expresaron no querer enfrentar más riesgos más riesgos en su camino", indicó.
"En ningún momento el INM les ha prometido nada que la institución no haya cumplido", agregó.
Un grupo de migrantes, principalmente venezolanos, apareció en Acapulco luego de partir desde Chiapas y ser interceptados en Oaxaca por autoridades policiacas y migratorias.
"Los subieron en 10 autobuses, por familias, y se los llevaron", explicó Irineo Mujica, defensor de derechos humanos.
De acuerdo con varios testimonios, otros migrantes han sido llevados a los estados de Veracruz, Michoacán, Yucatán y Tabasco.
Los migrantes aseguraron que funcionarios del INM les prometieron que serían llevados a oficinas donde les ayudarían a agilizar los trámites para obtener una visa humanitaria, pero sólo les entregaron un permiso temporal de 10 días para estar legalmente en Guerrero.
Los afectados advierten que, además de ser engañados, fueron llevados a una entidad que es insegura y no pueden trasladarse a otro lugar, ya que, según declararon, han recibido advertencias de funcionarios migratorios de que, si salen de esa zona, podrían ser aprehendidos, e incluso, deportados.