En el mundo de los parques de diversiones, no toda la magia le pertenece a Disney. Y Efteling, un sorpresivo parque de diversiones en Holanda es la prueba máxima, pues ha sido catalogado como “el mejor de Europa”, destronando al mismo Disneyland París. La ambientación, los juegos mecánicos y las referencias a la cultura local le han ganado un lugar privilegiado en el mapa de los recintos dedicados a la diversión y la adrenalina.
Ubicado en la ciudad de Kaatsheuve, a poco más de una hora de Ámsterdam y con fácil acceso vía tren y autobús, este lugar que abre los 365 días del año, se ha convertido en un destino alternativo para quienes visitan los Países Bajos.
El parque es un un gigantesco complejo que tiene más de 30 atracciones divididas distribuidas a lo largo de 72 hectáreas y rodeadas por un bosques. La entrada cuesta 51 euros, cuota que está debajo de las tarifas más bajas del Disneyland parisino y que han contribuido a atraer a más de 5.5 millones de visitantes, como ocurrió en 2023, según su sitio web.
El recinto ofrece también opciones de alojamientos como hoteles y villas; además, cuenta hasta con un campo de golf. Uno de los rasgos distintivos de Efteling es el sentido inmersivo que se percibe a lo largo de sus áreas o reinos: el misterioso, el de la fantasía, de la aventura, el reino salvaje y el de la magia. Cada uno de estos traslada a los visitantes a mundos de ficción que poco tienen que ver con la propuesta a la que nos ha acostumbrado Disney, pues la ambientación de castillos, palacios orientales y casas del terror se siente diferente y, en ocasiones, hasta oscura.
Efteling, experiencia con mucha adrenalina
Este parque no ha necesitado de mascotas o de un. personaje emblemático para ganar adeptos. A lo largo de su historia, el diseño del parque se ha desarrollado con creativos como el cineasta Peter Reijnders y los artistas Ton van de Ven o Anton Pieck, uno de los ilustradores más reconocidos de Holanda y destacado por sus ilustraciones de libros infantiles.
En 1950, Pieck fue convocado para participar en el diseño del parque original concebido como “un parque de cuentos de hadas con un patio de juegos”, recreando escenas de cuentos como Caperucita Roja, Pinocho o Hansel y Gretel de una forma más fiel a los libros originales.
El dibujante fallecido en 1987 estableció un estilo y una paleta de color que se utiliza en el parque de diversiones hasta la fecha. Su sucesor, Ton van de Ven, un dibujante autodidacta discípulo de Pieck, continuó el legado durante el diseño del parque como se conoce.
Bajo su labor, se desarrollaron atracciones de larga escala como la casa embrujada Spookslot, la actualización del barco pirata más antiguo del mundo, Halve Maen, y el juego acuático Piraña. Este creativo también concibió los dark rides que le han dado fama al parque como Fata Morgana, que recrea con animatrónicos el mundo de Las mil y una noches.
No hay un buen parque de diversiones sin montañas rusas y juegos que lleven la aventura al límite, y en este parque de Holanda hay bastante de eso. En Baron 1898, una de las llamadas montañas rusas de buceo, un vehículo se precipita en una caída libre desde 40 metros de altura a 50 kilómetros por hora
También está Python, una montaña de doble vuelta que por mucho tiempo fue la más grande de Europa, o Joris en de Draak, una montaña de madera de doble carril en la que los temerarios se enfrentan al fuego de un dragón. En una visita hecha en octubre, las filas de los juegos principales no superaban los 40 minutos de espera, mientras que las líneas de pasajeros sencillos promediaban los 15 minutos de espera.
Una inspiración para Disney
Fue el diario británico The Sun el que catalogó al parque Efteling como “el mejor de Europa”, según las respuestas de varias personas al hablar de su visita. El nombramiento se esparció con rapidez y consolidó las comparaciones con Disneyland y sus distintos parques.
La leyenda dice que el mismo Walt Disney visitó el parque neerlandés en varias ocasiones para buscar inspiración para su primer parque, que abrió en 1955, tres años después de la apertura de Efteling. La posibilidad de una visita de Disney ha sido también alimentada por algunos de los viajes que el creador de Mickey realizó a Copenhague en búsqueda de creatividad, así como por algunos castillos reales que han inspirado diferentes parques de la compañía.
Por si fuera poco, previo a la apertura de Disneyland París, el gigante del entretenimiento estadounidense consultó con el equipo de Efteling para desarrollar estrategias de atracción de audiencias europeas. Con el andar de Walt Disney o sin él, este parque neerlandés ha creado su propia magia, que en 2020 hizo que tuviera más visitantes que la versión parisina de Disneylandia. Pero si algo comparten, es que la magia no se detiene, pues Efteling recién abrió una nueva atracción de terror que atrajo multitudes y en 2025 abrirá un nuevo hotel.
