El primer vistazo al nuevo aspecto del interior de Notre Dame de París, restaurado tras el incendio de abril de 2019, reveló este viernes una catedral diáfana de muros blanqueados y resplandecientes.
La nueva apariencia de Notre Dame quedó a la vista pública durante la visita final del presidente francés, Emmanuel Macron, a las obras de reconstrucción antes de su reapertura, el 7 de diciembre.
“Está a la vez reparada, reinventada y reconstruida”, declaró el jefe de Estado al entrar en el majestuoso edificio junto a su esposa, Brigitte Macron, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, y el arzobispo de París, Laurent Ulrich, entre otras autoridades.
Macron resaltó que el templo gótico le resulta ahora mucho “más hospitalario”, gracias a la piedra blanqueada, que antes del incendio del 15 de abril de 2019.
“Lo que me ha impresionado es la claridad”, apuntó por su parte la ministra de Cultura francesa, Rachida Dati, en conversación con una igualmente asombrada Brigitte Macron.
A continuación, las autoridades deambularon primero por la nave, cuyo techo cedió en 2019 a consecuencia del fuego, y por el resto de del templo gótico.