Derivado del cierre temporal a las exportaciones mexicanas de ganado a Estados Unidos por la aparición de gusano barrenador, hasta 75 mil cabezas quedarían detenidas, por un valor de 75 millones de dólares, estimó la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG).
Homero García, presidente nacional de la CNOG, explicó en conferencia que en 2023 se exportaron a Estados Unidos 1.3 millones de becerros, por un valor de mil millones de dólares, es decur un promedio de 25 mil cabezas por semana, por un valor de un millón de dólares.
"Si ponemos en todo el año cerrar en un millón 400 mil animales, a mil dólares la cabeza para allá, ahorita en estas tres semanas que estuviera cerrado serían como 25 millones de dólares por semana", calculó.
Sin embargo, detalló que no se puede hablar de una pérdida, pues se trata de un cierre temporal que podría prolongarse unas tres semanas, hasta que México y Estados Unidos definan un protocolo de seguridad sanitaria para el paso de ganado vivo.
"Ahorita con el cierre temporal no será tanta diferencia (del valor de las exportaciones) porque en algún momento ese ganado que iba a pasar esperará y pasará en tres semanas, si llegan a cerrar completamente por casos más arriba (de la frontera sur) sí pudiéramos hacer una determinación de cuál pudiera ser la pérdida", detalló García de la Llata.
Así, se calcula que sea a mediados de diciembre cuando las exportaciones de ganado mexicano puedan ingresar nuevamente a Estados Unidos.
Pero, debido a que los centros cuarentenarios no tienen capacidad para albergar, deben regresar a sus estados de origen e incluso rehacer el trámite de exportación, en consecuencia, los productores tendrán un mayor costo de producción.
Además, se prevé que entre los nuevos requerimientos que se soliciten para la exportación habrá costos por infraestructura para vigilancia sanitaria, así como de aplicación de desparasitantes y baños de inspección.
"El protocolo es que todo el ganado que esté en nuestras cuarentenarias del norte tendrá que ser desalojado inmediatamente y proceder a una desinfección y tendrá que regresar ahí cerca a seguir esperando o su lugar de origen, que es un costo asociado", puntualizó.
El titular de la CNOG insistió en sellar la frontera sur para el paso de ganado irregular desde Centroamérica.
Adelantó que entre las medidas que se esperan será la de un punto de inspección sanitaria, pasando la entrada por el sur, posiblemente por la región del Istmo.
De acuerdo con los productores, del total de ganado producido en el País, cerca de 8 millones de cabezas, únicamente el 15 por ciento se va de exportación, especialmente a Estados Unidos.