La dirección del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) anunció este lunes la designación por unanimidad de Olaf Scholz como candidato a canciller para las elecciones generales anticipadas del próximo 23 de febrero.
"Hemos designado hoy por unanimidad en la reunión de la Presidencia a nuestro canciller, Olaf Scholz, como candidato a canciller en las próximas elecciones generales", dijo Saskia Esken, copresidenta del SPD, en una rueda de prensa en la sede berlinesa de la formación, cuya militancia deberá validar la decisión de la dirección en un congreso que tendrá lugar el próximo mes de enero.
Esken, junto al también copresidente del SPD, Lars Klingbeil, y al propio canciller, presentaron la decisión de la cúpula de un partido que vuelve así a confiar en Scholz para que asuma el liderazgo del país tras la crisis política desatada por la decisión del jefe de Gobierno de expulsar de la coalición gubernamental a Christian Lindner, ministro de Finanzas y líder del partido liberal (FDP).
Aquella decisión rompió el tripartido en el Gobierno que habían formado desde finales de 2021 y hasta principios de este mes el SPD, Los Verdes y el FDP.
"El SPD se pone en modo campaña", dijo Klingbeil tras explicar que la dirección del SPD había apoyado la candidatura de Scholz de forma "decidida" y con una actitud "combativa".
Tras explicar la decisión de la cúpula de los socialdemócratas, Scholz tomó la palabra para agradecer el nombramiento y prometer una lucha en la próxima campaña electoral en la que el SPD defenderá una política que haga que al país "le vaya bien en situaciones difíciles" como las que actualmente afronta Alemania, la mayor economía de Europa y la tercera a nivel mundial.
Scholz dijo que defendería una política que mantenga el apoyo a Ucrania frente a la invasión de Rusia, que haga posible que en el país no se pierdan puestos de trabajo, que plantee mejoras sociales a, entre otros, jubilados, inquilinos ante los problemas del mercado de vivienda o jóvenes familias, además de presentar "proposiciones inteligentes" para financiar cuanto necesita el país.
El canciller también defendió que el "potencial de voto" para su partido es alto, pese a que las encuestas de intención de voto ven al SPD como tercera fuerza política, con un 14 % del apoyo del electorado, por detrás de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD, 19 %) y muy lejos de la Unión Cristianodemócrata (CDU), a la que se atribuye un 32 %.