Agencia Reforma | 17/11/2024 | 12:34
Las fuerzas terrestres israelíes alcanzaron su punto más profundo en el Líbano desde que comenzaron su invasión hace seis semanas, pero se retiraron poco después tras sostener fuertes enfrentamientos con militantes del grupo político-paramilitar Hezbolá, informaron medios estatales libaneses.
Las tropas israelíes capturaron una colina estratégica en la localidad de Chamaa, en el sur del Líbano y a unos 5 kilómetros de la frontera israelí, informó la Agencia Nacional de Noticias estatal.
De acuerdo con los reportes, los soldados israelíes abandonaron la colina más tarde.
Los medios libaneses informaron que las tropas israelíes detonaron el Santuario de Shimon el Profeta en Chamaa, así como varias casas antes de retirarse, pero la declaración no pudo ser verificada de inmediato.
El Ejército de Israel dijo en un comunicado que sus tropas "continúan su actividad operativa limitada, localizada y dirigida en el sur del Líbano". El Ejército no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios sobre los informes de los medios libaneses.
El avance terrestre se produjo mientras los aviones de guerra israelíes bombardeaban los suburbios del sur de Beirut, así como varias otras áreas en el sur del Líbano, incluida la ciudad portuaria de Tiro.
El ataque matutino en Beirut azotó un área conocida como Dahiyeh, que el Ejército israelí señaló que era un bastión de Hezbolá, grupo respaldado por Irán. Las tropas de Israel indicaron que sus aviones habían impactado múltiples sitios utilizados por la milicia chiita. Los residentes recibieron un aviso previo por parte de Israel.
En el este de Líbano, donde Hezbolá está bien implantada, seis personas, entre ellas tres niños, murieron en un bombardeo israelí, según el Ministerio de Salud.
Y en el sur, dos bombardeos del "enemigo israelí" costaron la vida a dos socorristas, indicó ayer el Ministerio.
Hezbolá reivindicó varios disparos de cohetes hacia el norte de Israel y dijo haber disparado "un misil" contra un tanque israelí en el sur de Líbano.
El Ejército israelí confirmó más tarde que Hezbolá disparó alrededor de "80 proyectiles" desde Líbano hacia su territorio.
"Alrededor de 80 proyectiles disparados por la organización terrorista Hezbolá atravesaron la frontera de Líbano hacia Israel", indicó el Ejército en un comunicado.
Una sinagoga fue impactada por los cohetes lanzados por los militantes chiitas y dos personas resultaron heridas. Varios proyectiles fueron interceptados.
Asimismo, dos bengalas cayeron cerca del domicilio del Primer Ministro Benjamin Netanyahu en Cesarea, en el centro, quien no se encontraba en el lugar, anunció la Policía israelí.
"El Premier y su familia no se encontraban en la casa", añadieron, refiriéndose a lo ocurrido como "un incidente grave" y "una peligrosa escalada".
El aumento de los ataques se produjo mientras los funcionarios libaneses y de Hezbolá estudian un borrador de una propuesta presentada por Estados Unidos a principios de esta semana para poner fin a la guerra.
El Primer Ministro interino del Líbano aparentemente instó a Irán a tratar de convencer a Hezbolá para que acepte un acuerdo de cese al fuego con Israel, lo que requeriría que el grupo se retirara de la frontera entre Israel y el Líbano. La propuesta se basa en la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que puso fin a la última guerra entre Israel y el grupo líbanes en el verano de 2006.
Hezbolá abrió un frente contra Israel en solidaridad con Hamas tras el inicio de la guerra en la Franja de Gaza el 7 de octubre de 2023, desencadenada por el ataque de ese movimiento islamista palestino en suelo israelí.
Pero desde finales de septiembre, Israel intensificó dramáticamente su bombardeo en el Líbano, bajo la promesa de incapacitar a Hezbolá y poner fin a sus ataques en su territorio que movilizaron a 60 mil habitantes al norte del país.
Más de 3 mil 400 personas han sido asesinadas en el Líbano por fuego israelí -el 80 por ciento de ellas en las últimas ocho semanas- según el Ministerio de Salud del Líbano.