Francia y Portugal han movilizado ayuda para hacer frente a las consecuencias de la DANA en España a través del Mecanismo de Protección Civil de la UE, que activaron las autoridades españolas para que Bruselas coordine el suministro de asistencia de emergencia a la Comunidad Valenciana.
En concreto, París y Lisboa han movilizado maquinaria y vehículos de gestión de residuos para apoyar las operaciones en las zonas afectadas, ha explicado la Comisión Europea en un comunicado, en el que confirma que otros Estados miembros también han ofrecido ayuda a España.
En este sentido, Bruselas mantiene contacto con las autoridades españolas para evaluar el tipo de ayuda ofrecida y canalizar la asistencia adicional que sea necesaria. Igualmente, el Ejecutivo europeo ha desplazado hasta el terreno a un oficial de enlace para que realice los trabajos de coordinación de la ayuda europea.
La UE ofreció material de refugio, suministros sanitarios y medios de limpieza, así como el envío de equipos de expertos en logística y gestión de aguas y residuos para ayudar a los medios desplegados en la Comunidad Valenciana frente a las consecuencias de las riadas.
En los últimos días, Bruselas ha mantenido contactos técnicos con las autoridades españolas para garantizar que la asistencia ofrecida encaja con las necesidades en el terreno. Así las cosas, el comisario de Gestión de Crisis, Janez Lenarcic, ha agradecido la respuesta "inmediata y eficaz" de Francia y Portugal ante la petición urgente de ayuda de España.
"Su apoyo en la gestión de residuos y en los esfuerzos de recuperación, junto con las ofertas de ayuda de otros Estados miembros, pone de manifiesto la fuerte solidaridad dentro de la UE, garantizando que España disponga de los recursos necesarios para la recuperación", ha explicado.
Por su lado, el Gobierno de Portugal ha confirmado el envío de una fuerza conjunta de Protección Civil y de las Fuerzas Armadas para ayudar en el terreno en la Comunidad Valenciana, en un despliegue que implicará a más de un centenar de efectivos.
En concreto, este contingente está formado por 101 trabajadores de la Autoridad Nacional de Emergencia y Protección Civil (ANEPC), de Bomberos de Lisboa, de Bomberos Voluntarios y del Instituto Nacional de Emergencia Médica, así como por 28 militares de las tres ramas de las Fuerzas Armadas, según una nota del Gobierno luso.
Esta fuerza conjunta, que tenía previsto partir este mismo martes, contará con más de medio centenar de vehículos, entre los que figuran retroexcavadoras y motobombas. El Gobierno de Portugal recuerda que ya ofreció ayuda "el mismo día de la tragedia" y enmarca este compromiso final dentro del Mecanismo de Protección Civil de la UE.
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