Jorge Torres | 09/11/2024 | 01:42
La contaminación del agua en San Luis Potosí es un problema grave que afecta a todos los ciudadanos; existen grandes desafíos en cuanto a la gestión y conservación de este recurso; la problemática se agrava con la sobreexplotación de acuíferos; la contaminación de cauces y cuerpos de agua es otra preocupación importante; el acuífero profundo, principal fuente de agua consumida en la zona metropolitana, está contaminado.
En riesgo inteligencia de niñez potosina
El investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), Fernando Díaz Barriga, consideró que es urgente la necesidad de abordar la crisis del agua en el estado con una perspectiva integral y coordinada; además de que la contaminación de este recurso crea un problema que afecta, en particular, el desarrollo cognitivo de los infantes.
Destacó que el impacto de la contaminación no se limita a problemas físicos, pues uno de los mayores problemas en San Luis Potosí derivado de la exposición al arsénico y el flúor en el agua, es una disminución en el coeficiente intelectual de los niños.
Señaló que “Estamos viendo una reducción irreversible en la inteligencia, lo que provoca fracaso escolar y laboral, y esto puede convertirse en una fuente de violencia".
Contaminación persistente
Díaz Barriga indicó que el asunto de la contaminación es distinto en las diferentes partes del estado, por ejemplo en la Huasteca preocupa mucho la contaminación biológica de los ríos, las descargas orgánicas por falta de plantas de tratamiento, "es verdaderamente un problema la contaminación de los ríos en la Huasteca, esto puede causar problemas de salud gravísimos".
En cuanto a la Zona Media están los plaguicidas; en el Altiplano está el arsénico y el flúor presente en el agua.
Uranio, otro grave problema
En la zona metropolitana además de arsénico y flúor, se tiene detectado otro grave problema de contaminación por uranio, que daña los riñones; a esto se suma la presencia de plásticos y sus aditivos, así como de descargas orgánicas que, debido a fracturas geológicas, se filtran hacia el manto acuífero subterráneo, como en Soledad de Graciano Sánchez.
"También está la contaminación de fuentes superficiales, por ejemplo hay fracturas en el áreas de Soledad donde existe un contacto entre la superficie y el manto subterráneo de agua, entonces todos los contaminantes fácilmente llegan al cuerpo de agua profundo", explicó.
Crisis hídrica en todo el estado
El experto universitario dijo que el problema del agua en la zona metropolitana ha invisibilizado el problema estatal, "aquí nos preocupamos porque tenemos menos agua de lo normal, pero Ciudad Valles en el ciclo anterior se quedó sin agua varios días; y en el Altiplano hay comunidades que han sufrido esta crisis hídrica desde hace décadas".
Destacó que este es un problema estatal, no es nada más de la ciudad, es más no es solamente en esta zona centro, Villa de Reyes, con Zaragoza, con Soledad de Graciano Sánchez, con Cerro de San Pedro, con Mexquitic de Carmona, con Villa de Arriaga, inclusive con Santa María del Río; la zona norte de la ciudad y en comunidades marginadas del Altiplano, donde la exposición a estos contaminantes es alta y persistente.
Urge atender la problemática
Díaz Barriga consideró que el problema del agua es un problema de equidad transgeneracional que si no se resuelve ahora, los niños del futuro van a tener muchos problemas, y la culpa va a ser de los actuales gobernantes; señaló que la gestión del agua requiere una visión de largo plazo y una perspectiva de equidad transgeneracional. “Este es un problema de todas las regiones del estado. Si no tomamos medidas ahora, serán las futuras generaciones las que paguen las consecuencias”.