El canciller alemán, Olaf Scholz, canceló este jueves su participación en la conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP29) que comienza la semana que viene en la capital azerbaiyana, Bakú, tras la ruptura en la noche del miércoles de su Gobierno de coalición.
"El canciller ha cancelado su viaje la semana que viene a Bakú", señaló a EFE una fuente del Gobierno, que confirmó que la decisión responde a la actual situación política interna.
Inicialmente, Scholz tenía previsto viajar a la capital azerbaiyana para el inicio de la cumbre y participar, entre otros, en un acto organizado por el Club del Clima impulsado por el mismo canciller para afrontar el calentamiento global y reducir las emisiones de CO2 de la industria.
"Esperamos que el canciller viaje a la #COP29. ¡Cualquier otra cosa sería, tras la elección de Trump, una señal fatal del canciller del mayor estado de la UE! Porque la crisis climática no se detiene ante nuestra crisis de gobierno. Ahora mismo es necesario un liderazgo de Alemania y de la UE", exigió por su parte el movimiento Fridays For Future en su cuenta de X.
Todavía no está claro si por contra sí asistirán a la conferencia como estaba previsto la ministra de Exteriores, Annalena Baerbock; el de Economía y Protección Climática, Robert Habeck; y la de Medio Ambiente, Steffi Lemke, todos ellos de Los Verdes.
Horas antes, la organización 'Fridays For Future' se refirió asimismo a la ruptura de la coalición entre socialdemócratas, liberales y verdes tras el cese anoche del ministro de Finanzas, el liberal Christian Lindner, y anunció su plan de celebrar "grandes huelgas climáticas en toda Alemania el viernes antes de las elecciones".
"Porque una campaña electoral sin clima es una campaña electoral sin mundo. ¡Nos vemos en las calles!", escribieron los activistas.
El canciller alemán anunció anoche tras la ruptura del gobierno de coalición su intención de someterse a un voto de confianza del Bundestag, la Cámara Baja del Parlamento alemán, el 15 de enero próximo que, de no recibirlo, como es de esperar, abrirá el camino hacia unas elecciones a finales de marzo, como ya anticipó el propio Scholz.