El presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, instó este jueves a todos los líderes políticos a asumir su responsabilidad ante el enorme reto que supone ahora tener un Gobierno en minoría y, con casi total seguridad, unas elecciones generales anticipadas en marzo tras la ruptura de la coalición.
"No es el momento de tácticas y escaramuzas. Es el momento del sentido común y la responsabilidad. Espero de todos los responsables que estén a la altura de la magnitud de los retos", señaló el jefe de Estado en una breve comparecencia ante los medios.
Steinmeier recordó que en los 75 años de historia de la República Federal de Alemania, rara vez ha ocurrido que una coalición de Gobierno dejara de tener mayoría en la Cámara Baja o Bundestag antes del final de la legislatura.
El presidente de Alemania señaló que, si bien el colapso del Gobierno liderado por el socialdemócrata Olaf Scholz y formado hasta ahora por el partido de éste, los verdes y los liberales, "no es el fin del mundo" y la Constitución germana incluye provisiones para estos casos, "es una crisis política que tenemos que dejar atrás y que dejaremos atrás".
"La Ley Fundamental establece directrices claras para el procedimiento ulterior, nuestra democracia es fuerte", recalcó, al tiempo que explicó que la víspera Scholz le pidió que destituyera al ministro de Finanzas, el jefe de los liberales, Christian Lindner, y a los otros dos ministros del Partido Liberal (FDP) que abandonarán la coalición: Marco Buschman (Justicia) y Bettina Stark-Watzinger (Educación) esta tarde sobre las 13.00 GMT.
El canciller y los restantes ministros de los socialdemócratas y verdes permanecerán en sus respectivos cargos, aunque en un Gobierno de minoría, tal y como lo prevé la Carta Magna germana.
Scholz, tras expulsar a los liberales de la coalición por diferencias insuperables en materia de política económica y financiera, se someterá el 15 de enero próximo a una cuestión de confianza en la Cámara Baja, la vía a través de la cual el Parlamento puede allanar el camino a unas elecciones anticipadas.
Antes del colapso de la coalición los comicios generales estaban previstas para el 28 de septiembre, mientras que ahora, dada la elevada posibilidad de que Scholz pierda el voto por estar en minoría, se celebrarán probablemente de forma anticipada en marzo.
El presidente alemán debe decidir sobre la disolución de la Cámara Baja si ésta retira su confianza al canciller, de conformidad con el artículo 68 de la Ley Fundamental.
"Estoy dispuesto a tomar esta decisión", señaló Steinmeier, quien insistió en que Alemania "necesita mayorías estables y un Gobierno capaz de actuar", por lo que "esa será mi vara de medir".
Indicó que "mucha gente en nuestro país está preocupada por una situación política incierta en nuestro propio país, en Europa, en el mundo, también después de las elecciones en los EE.UU.", por lo que dejó claro que ha llegado la hora de la "sensatez y responsabilidad" parra los políticos germanos.