A diferencia de años anteriores, cuando por estas fechas ya cruzaban Nuevo León rumbo al sur de México, este otoño la migración de las mariposas monarca ha sido escasa.
Especialistas y observadores señalaron que desde que inició lo que debería ser la temporada de migración, a mediados de octubre, han sido pocos los avistamientos de estas mariposas en lugares donde se solían encontrar.
"Viene un poco retrasada la migración y muy escasa", señaló Rocío Treviño, coordinadora de Correo Real, programa de Protección de la Fauna Mexicana, A.C., cuya labor es ayudar en la conservación del fenómeno migratorio de las mariposas monarca.
"La verdad es que estamos viendo muy pocas y, además, muy dispersas. Es el primer año en casi 40 años que tengo siguiendo a la migración, nunca me había pasado eso".
Compartió que en lo que va de la temporada, Correo Real ha recibido pocos reportes de avistamientos por parte de observadores y ciudadanos en general. Mientras que algunos días son vistas sólo dos o tres, en otros no se reporta una sola.
Treviño y otros expertos consultados señalaron que la ruta se ha visto afectada por las altas temperaturas tanto en el norte de México como en Canadá y Estados Unidos, de donde emigran las mariposas monarca.
Ya que en ambos países del norte el clima ha sido más cálido que en años anteriores, las mariposas monarca no han sido "empujadas" hacia el sur.
"Estamos deseando que venga el frío", dijo Treviño. "Casi siempre ellas avanzan desde Estados Unidos y Canadá por los frentes fríos, por el viento del norte que las empuja".
La especialista advirtió que la misma falta de avistamientos se ha dado en otros estados del norte del País, por lo que dudó de la posibilidad de que no se encuentren en Nuevo León por haber tomado otro rumbo.
El repunte sin precedentes en casos de dengue también ha afectado a las mariposas, ya que les resulta tóxica la fumigación que realizan las autoridades sanitarias para acabar con el mosquito transmisor y que este año se ha visto reforzada.
"Tienen esa amenaza a través de toda la ruta, porque ahora sí que el dengue se extendió demasiado en muchos estados".
Esta semana, que tradicionalmente ha sido el pico de la migración en Nuevo León, los avistamientos han sido mínimos en el Parque Ecológico Chipinque, una de las áreas donde suelen refugiarse las mariposas.
Mientras que en años anteriores era común que en ciertos momentos del día volaran hasta cientos de mariposas en un minuto, los investigadores del parque ahora han registrado sólo entre 10 y 15.
"Sí hemos visto ahora que vienen como un poquito atrasadas, vienen un poquito menos individuos", dijo Jonathan Morales, miembro del equipo de investigación y coordinador de información para la conservación del parque.
"Estamos en la semana en que usualmente registramos el pico de actividad. Sí hemos visto que, poquito a poquito, van pasando cada vez más, pero no al nivel que las hemos visto en años anteriores".
Otros investigadores, como Humberto Quiroz, investigador de la Facultad de Biología de la UANL, consideran que las mariposas monarca podrían evitar volar por zonas del área metropolitana impactadas por la urbanización.
LLEGAN MENOS...
La mariposa monarca disminuyó el invierno pasado su presencia en los bosques de hibernación mexicanos, reportó en febrero National Geographic .
De acuerdo con un reporte de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, el invierno pasado sólo menos de una hectárea de estos bosques estuvo ocupada por la mariposa viajera. Las nueve zonas de hibernación de estos insectos alados están en Michoacán y Estado de México.
Las grandes amenazas que enfrentan las mariposas monarcas a través de su ruta migratoria por Canadá, Estados Unidos y México son el uso de herbicidas y plaguicidas, y el impacto del cambio climático.
La migración de las monarca inicia en agosto, llegando a México en octubre. Se asientan en el centro de México a inicios de noviembre. El vuelo de regreso al norte comienza a principios de marzo.