Reforma | 03/11/2024 | 10:17
Este "Potrillo" no sabe rajar y así lo demostró Alejandro Fernández al sacar la casta en un memorable homenaje a su fallecido padre, el ícono de la música ranchera, Vicente Fernández, justo en el Día de los Muertos.
Alejandro hizo vibrar a la Plaza de Toros Lorenzo Garza con un concierto cargado de sentimiento, emotividad y también de ovaciones, dedicado a su "querido viejo". Este concierto tuvo elementos que le permitieron acariciar el éxito de inmediato.
De Rey a Rey Tour es un espectáculo pensado del sentimiento profundo de un hijo hacia a un padre, pero también del orgullo que siente por el hombre que fue su ejemplo de vida y que lo subió a los escenarios cuando tenía 5 años, además de enseñarle a portar el traje de charro.
A las 21:40 horas, el sonido de unas espuelas retumbaron en el lugar y el público calló. Después, la voz del fallecido Chente se escuchó para pedir un aplauso para el menor de sus "potrillos". Y la primera ovación regia se escuchó.
La poderosa voz de Alejandro interpretó canciones que lleva tatuadas en su corazón, herencia de su padre, pero también que están guardadas en la memoria colectiva de un público fiel, que al escuchar los grandes éxitos de Vicente demostró ese "hermoso cariño" a su legado musical.
Ante un recinto a reventar, 10 mil personas, reportaron los organizadores, en este lugar donde leyendas de la música mexicana como Vicente o Antonio Aguilar vivieron días gloriosos con el público regio; ahora, Alejandro levantó los ánimos del público con icónicos temas como "No Me Sé Rajar" y "Las Llaves de mi Alma".
El heredero del "Charro de Huentitán", de 53 años, se plantó en un escenario 360 para honrar la memoria de su padre, fallecido el 12 de diciembre de 2021.
Con una melena más castaña, barba y bigote crecido, el artista movió su cuerpo en "Mi Ranchito", una melodía en la que además del mariachi y su grupo, lo acompañó un acordeonista.
Las mujeres gritaron al ver bailar, aunque sea poquito, al intérprete.
Del pasado se fue a las últimas joyas de su papá, como "Estos Celos". El coro masivo volvió a hacerse presente.
"Fuerte, hasta el cielo", expresó efusivo Alejandro.
Después señaló que en este Día de los Muertos no tuvo oportunidad de ir a ver a su papá al lugar donde están sus restos por cuestiones de trabajo.
"¡Buenas noches, Monterrey!Esta es una de las noches más especiales de mi vida. Tengo el corazón a punto de salirse del pecho, y como lo escribí hace algunos días, tuve la suerte de haber nacido con dos grandes bendiciones en mi vida: la primera, ser mexicano, y la segunda, ser Fernández", expresó Alejandro.
"Hoy vamos a celebrar, en este día tan especial, en este Día de los Muertos, desafortunadamente no tuve chance de ir a visitar a mi padre, le había preparado un altar, pero estamos aquí en Monterrey, y vamos a hacerle un homenaje como a él le hubiera gustado, en vida, y cantando fuerte todas sus canciones. ¡Que viva Vicente Fernández!", gritó para obtener otro "viva" de la audiencia.
Los coros retumbaron en "Lástima que Seas Ajena" y "De Qué Manera te Olvido", "La Ley del Monte" y ese "Hermoso Cariño" por Vicente revivió en un show.
El Potrillo regresó a tierras regias luego de ofrecer dos shows en junio pasado en el Domo Care, pero sin duda el de anoche fue un concierto especial.
De Rey a Rey demuestra que El Potrillo es un digno heredero de su padre.
Y mientras aplaudan, Alejandro también seguirá cantando.