Los índices de contaminación del aire de Nueva Delhi superaron este viernes más de veinte veces los niveles recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la situaron como la urbe con peor calidad de aire del planeta, un día después del festival hindú de Diwali, en el que la población desafió el veto al lanzamiento de pirotecnia.
El indice de calidad del aire (ICA) de la capital india ascendía a 360 a las 10:00 hora local (3:30 GMT), según datos de la Junta Central de Control de la Contaminación (CPCB, en inglés), lo que entra en la categoría "muy pobre".
Este nivel de contaminación es más de veinte veces superior al límite diario fijado por la OMS, que considera peligrosa una exposición diaria de más de 15 microgramos por metro cúbico de aire.
Algunos barrios registraron un índice superior a 500 unidades a lo largo de la noche, que es el valor máximo que alcanzan los sistemas de medición.
Esto situó a Nueva Delhi como la ciudad más contaminada esta mañana, según la plataforma suiza especializada en la medición de la calidad aire, IQair.
Es habitual que la capital india encabece en los últimos años este listado la mañana siguiente de Diwali, dado que además de decorar las casas con luces e intercambiar dulces, es habitual que la población celebre este festival hindú con el lanzamiento de petardos y fuegos artificiales.
Así volvió a suceder anoche en Nueva Delhi, a pesar de que las autoridades prohibieron el pasado septiembre la venta, producción y uso de pirotecnia hasta 2025 para tratar de contener la contaminación.
Los fuegos artificiales iluminaron el cielo de la capital hasta altas horas de la noche en buena parte de sus barrios, acompañado por el estallido de petardos, que envolvió poco a poco a la ciudad en un tóxico esmog -una mezcla de humo y niebla-.
Además del veto a la pirotecnia, el Gobierno regional había pedido a la población contención y afirmó que 300 equipos de la Policía habían sido movilizados para evitar el lanzamiento de petardos.
Debido al empeoramiento de la calidad del aire que la capital india experimenta en las últimas semanas, ya están en marcha varias medidas, como el barrido y la limpieza con agua de las carreteras para controlar la dispersión del polvo.
El deterioro alarmante de la calidad del aire de Nueva Delhi es habitual en esta época del año, cuando coinciden una serie de factores como la llegada del invierno y la disminución de los vientos que impiden la dispersión de los agentes contaminantes.
Las emisiones contaminantes de los vehículos, el polvo de la construcción o la quema de rastrojos de los cultivos en los estados vecinos a la capital contribuye también al pico de contaminación.