Las personas que están privadas de su libertad en los centros de reinserción social en el estado son más vulnerables a padecer depresión, ansiedad y diabetes, padecimientos que predominan en este sector poblacional, así lo reconoció Margot Montes Sandoval, titular de Prevención y Readaptación Social en el Estado de San Luis Potosí.
“La diabetes es una enfermedad normal por la misma consecuencia de la prisión, eso se detona al igual que la ansiedad y la depresión”.
Ante las condiciones de la salud de las personas recluidas, éstas reciben las atenciones y tratamientos que corresponden para atender su estado de salud.
Asimismo dijo que se tienen alrededor de 80 personas probadas de su libertad de la tercera edad, mismas que se encuentran en el área geriátrica especial para atenderles.
Por último en cuanto a las riñas que se han registrado en los penales, aseguró que son situaciones “normales”, ya que este tipo de incidencias también se presentan extramuros, “la realidad es que las mismas familias se atreven a introducir objetos que son prohibidos, y lo único que podemos hacer es reforzar las medidas como las revisiones constantes”.