EFE | 08/10/2024 | 10:47
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, sancionó este martes un proyecto de ley para avanzar en la descarbonización del transporte y evitar la emisión de 705 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) hasta 2037, mediante el desarrollo de biocombustibles.
Al acto asistieron el vicepresidente Geraldo Alckmin, así como varios ministros del Gobierno, y la exmandataria y actual jefa del del banco de fomento del grupo BRICS, Dilma Rousseff, entre otras autoridades.
El plan, presentado por el Ministerio de Minas y Energía como "el mayor programa de descarbonización del mundo", pretende "desbloquear" inversiones por un valor de 260.000 millones de reales (47.000 millones de dólares/43.000 millones de euros).
La bautizada como ley del Combustible del Futuro fue aprobada en septiembre por el Parlamento y busca reducir la dependencia de hidrocarburos fósiles a través de la producción de nuevos combustibles sostenibles.
Entre las nuevas fórmulas figuran el diésel verde, producido mediante la transformación de grasas de origen vegetal y animal, la caña de azúcar y otras biomasas; el biometano, como alternativa al gas natural; y un combustible sostenible para el sector de aviación.
Las emisiones brutas de gases de efecto invernadero en Brasil alcanzaron las 2.300 millones de toneladas en 2022, un 8 % menos con respecto a 2021, según los últimos datos disponibles del Observatorio del Clima, la principal red de la sociedad civil brasileña en el área.
En paralelo, Brasil también quiere aumentar sus horizontes de exploración de petróleo en la región conocida como Margen Ecuatorial, situada a unos 500 kilómetros de la desembocadura del río Amazonas, lo que ha desatado las críticas de los grupos ecologistas.
La noticia antes que nadie
04-2017-022812463100-203
© 2024 Todos los Derechos Reservados de Grupo Plano Informativo. Prohibida la reproducción total o parcial, incluyendo cualquier medio electrónico o magnético.