Antes de terminar su gestión, el ex Jefe de Gobierno, Martí Batres, regresó al Congreso de la Ciudad tres aprobaciones de uso de suelo, en la Alcaldía Miguel Hidalgo, dos de ellas que permitían megatorres de 22 pisos.
En la sesión ordinaria de hoy se dará cuenta al Pleno.
Se trata de las modificaciones a los predios de Galileo 8, Manuel Ávila Camacho 37 y Constituyentes 151, construcciones con gran densidad que aprobaron diputados el último día de la Segunda Legislatura.
La de Galileo 8 es una modificación que planteaba que la construcción pasara de 5 a 22 niveles para permitir la construcción de un hotel, comercio y servicio de restaurante con venta de bebidas alcohólicas.
El revés de Batres que recibió el Congreso fue justificado en que no se cuenta con la opinión de la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) y que vecinos emitieron su inconformidad expresa.
En Ávila Camacho 37 se pasó de una construcción de 12 niveles a otra de 22 con la misma intención de construcción.
Batres argumentó que la Secretaría de Movilidad (Semovi) emitió una opinión desfavorable al igual que la PAOT y los vecinos de Polanco emitieron también su inconformidad.
La construcción, afirmó el ex mandatario, afectaría la seguridad vial, accesibilidad, eficiencia, sostenibilidad, calidad, inclusión y la igualdad.
Por último, en Constituyentes 151, en San Miguel Chapultepec, se buscaba construir hasta 167 viviendas.
REFORMA publicó el 17 de septiembre que la PAOT había negado una opinión favorable a este predio para la construcción de 71 viviendas un año antes, pero dio una positiva para las 167.
Batres señaló que la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda emitió una opinión no favorable y que los vecinos se manifestaron en contra, lo que permite echar para atrás el dictamen positivo.
Las observaciones fueron recibidas por el Congreso, quien deberá determinar si se vuelven a dictaminar de manera positiva o si se procede con el desechamiento de estas modificaciones al uso de suelo en la Miguel Hidalgo.
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