Copilot, el chatbot impulsado por inteligencia artificial de Microsoft, tiene la capacidad de generar texto, interpretar imágenes enviadas por los usuarios e incluso crearlas. Recientemente, se ha añadido una nueva función que le permite entender audios grabados desde la plataforma.
La visión de Microsoft es que Copilot se convierta en un asistente integral para las personas. “Copilot estará ahí para ti, en tu rincón, a tu lado y siempre en línea con tus intereses”, afirmó Mustafa Suleyman, vicepresidente ejecutivo y director de Microsoft AI.
Qué se puede hacer con Copilot
Copilot, impulsado por inteligencia artificial, ofrece múltiples herramientas para optimizar la productividad y la creatividad en diferentes áreas. Entre sus funciones características está la generación de texto, que permite crear desde correos electrónicos hasta historias o resúmenes en cuestión de segundos.
“¿Quieres redactar un correo electrónico rápido? ¡Listo! ¿Quieres encontrar tu próximo destino de viaje fantástico junto con ideas de vuelos y hoteles? ¡Listo!”, señala el equipo de Copilot.
Esta IA puede realizar tareas como comparar productos, proporcionar resúmenes de artículos y crear itinerarios de viaje.
Además, Copilot puede interpretar y generar imágenes usando el modelo Designer, integrado en la plataforma, lo que facilita la creación de contenido visual a partir de indicaciones textuales.
Otra de las funciones de Copilot es su capacidad de realizar búsquedas más interactivas y detalladas. A diferencia de los motores de búsqueda tradicionales, este asistente permite hacer preguntas complejas, recibir respuestas precisas y seguir una conversación basada en el contexto.
Por otro lado, Microsoft está implementando Copilot Voice, una función que permite a los usuarios interactuar con Copilot utilizando su voz. A través de esta modalidad, no solo pueden dar comandos hablados, sino que la inteligencia artificial también responderá de forma audible, facilitando una experiencia más dinámica y natural.
Copilot, ¿un compañero de IA para todos?
Mustafa Suleyman, vicepresidente ejecutivo y director de Microsoft AI, compartió su visión sobre el presente y futuro de Copilot. Según él, esta tecnología no solo acompañará a las personas en sus tareas diarias de una manera amigable y respetuosa, sino que también se adaptará y evolucionará según las preferencias y necesidades de cada usuario.
“Con el tiempo, se adaptará a tus modales y desarrollará capacidades basadas en tus preferencias y necesidades. No estamos creando una herramienta estática, sino que estamos estableciendo una interacción dinámica, emergente y en evolución”, explicó Suleyman.
El ejecutivo también destacó algunos ejemplos de cómo Copilot podría asistir a las personas en el futuro: “Te acompañará a la cita con el médico, tomará notas y hará un seguimiento en el momento adecuado. Compartirá la carga de planificar y preparar la fiesta de cumpleaños de tu hijo. Y estará allí al final del día para ayudarte a reflexionar sobre una decisión difícil de la vida”.
Suleyman subrayó que esta es una nueva era para la inteligencia artificial, donde su función va más allá de simplemente “resolver problemas”. Copilot no solo asistirá, sino que también estará ahí para apoyar, enseñar y facilitar el proceso de toma de decisiones en la vida cotidiana, según explica la compañía.
Retos de la inteligencia artificial
La visión de Mustafa Suleyman sobre Copilot es ciertamente optimista y promete un futuro donde la inteligencia artificial se convierte en un aliado para las personas en sus tareas cotidianas. Sin embargo, una preocupación recurrente entre los usuarios es la privacidad de sus datos.
Los modelos de IA, incluidos aquellos impulsados por grandes compañías tecnológicas, suelen enfrentarse a debates sobre cómo se manejan los datos durante su entrenamiento.
Un ejemplo claro de estos desafíos fue el caso de Meta, cuyo objetivo era utilizar datos de las publicaciones de Facebook e Instagram para entrenar su modelo de IA. Este proyecto fue detenido en la Unión Europea debido a preocupaciones sobre la privacidad y la protección de datos.
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