San Luis Potosí, SLP.- La ingeniera ambiental Daniela Melgarejo López, con especialidad en sostenibilidad urbana y saludable y maestría en Ciudades Sostenibles, indicó que el modelo de crecimiento urbano que ha, y continúa tomando la ciudad de San Luis Potosí, se ha desarrollado de forma exponencial, dispersa, desordenada y con evidente carencia de planeación urbana, pues, este crecimiento disperso, va dirigido a que se estaría abarcando gran cantidad de territorio para crecer, sin siquiera saber si es necesario o si de verdad se está eligiendo la zona adecuada para tal desarrollo, pues, de acuerdo a la experta, no se está considerando ningún elemento válido para llevar a cabo dicho crecimiento, puesto que además, se está consumiendo una importante extensión del suelo, sin tomar en cuenta que, así como el agua, el suelo es una matriz ambiental y un recurso finito y limitado, "estamos ocupando una gran extensión de suelo para crecer urbanísticamente y territorialmente hablando, sin ni siquiera tener este conocimiento de lo qué es necesario, esto es el modelo disperso urbano que ha tomado las ciudad".
Por tal motivo y referente al modelo de ciudades verticales, la experta señaló que en primera instancia, el crecimiento vertical podría ser una opción viable y benéfica para la ciudad, entre otras cuestiones, para dar descanso al uso de suelo que ha sido injustificado y descontrolado; puesto que, a través de esta política contraria, se lograría además la densificación urbana, "en el momento que dejas de construir un montón de casas unifamiliares una tras otra y tienes que abarcar mucho territorio, nunca te va a alcanzar para proveer lo suficiente, en cambio, la vivienda vertical, al crecer hacia arriba utilizando menos suelo, condensaba la población en una zona".
Asimismo, señaló que otro de los beneficios del fenómeno de la densificación urbana, es la eficiencia de la ciudad en materia de servicios, cuando densificar a través de la vivienda vertical, se vuelve más eficiente, además de la reducción de las distancias y fortalecimiento de la economía local, siempre y cuando se tenga cuidado con el proceso de planeación.
"Puede ir por ejemplo a la planta baja con comercios locales, se vuelve muy rentable, y de forma adecuada, la densificación bien aplicada reduce las distancias de un lugar a otro y pueden ser mucho más cortas sin depender del coche".
Malgarejo López precisó que, si bien esta dispersión poblacional trae muchos beneficios, pues va a la inversa de lo que se ha hecho referente al consumo del suelo, es necesario tener cuidado con otros aspectos referentes a la densificación, pues, a su vez, es necesario promover espacios públicos, que exista el suficiente y adecuado para la ciudadanía y un buen equilibrio entre este y la forma de vivienda vertical.
Asimismo, agregó la necesidad de tomar en cuenta el diseño urbano, pues es uno de los grandes problemas de otras ciudades que han optado por este modelo, diversos aspectos tales como la altura y una orientación adecuada.
A su vez, la ingeniero indicó la importancia de tomar en cuenta la escala humana, es decir, aquel factor que toma a las personas como medida primordial del desarrollo y la asociación, un paradigma que propone que las ciudades sean más habitables, más sanas y más sostenibles, es decir, lograr que salgan al espacio público como un fin de disfrute.
"Hay que tener cuidado con mantener esta escala, para que no provoque lo contrario: el sedentarismo y la individualidad".
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