Un estudio publicado en Science revela que la artemisina, un tratamiento para la malaria, mejora los síntomas de las mujeres con SOP. Este avance ha permitido mejorar la comprensión de esta enfermedad.
Un estudio reciente, publicado en la revista Science, ha revelado que un derivado de la planta artemisia, conocida por sus propiedades antipalúdicas, podría ser efectivo para tratar el síndrome de ovario poliquístico (SOP). Este trastorno hormonal es el más frecuente en las mujeres en edad reproductiva, llega a afectar hasta al 13%. Se caracteriza por la producción excesiva de andrógenos, un grupo de hormonas entre los que se encuentra la testosterona. También se producen alteraciones del ciclo ovulatorio y un incremento del número de folículos (estructuras en las que se desarrollan los óvulos). Además, las mujeres con SOP presentan un riesgo incrementado de obesidad, resistencia a la insulina, otros problemas metabólicos y esterilidad.
“Al estudiar su mecanismo de acción, se ha conseguido profundizar en el conocimiento de la fisiopatología del SOP.”
Dra. Gemma Casals
Ginecóloga
La investigación, llevada a cabo por la Universidad de Fudan en Shanghái, incluye experimentos con animales y un ensayo clínico piloto con 19 mujeres. Se observó que un derivado de la artemisinina reduce la producción de andrógenos y mejora los principales trastornos asociados al SOP.
Gemma Casals, ginecóloga especializada en medicina reproductiva del Hospital Clínic de Barcelona, destaca que “el interés de esta investigación no solo radica en que esta sustancia revierte las principales alteraciones de este síndrome, sino que, al estudiar su mecanismo de acción, se ha conseguido profundizar en el conocimiento de la fisiopatología del SOP.”
El modelo animal de SOP presenta ciertas limitaciones. Por este motivo, los autores realizaron un estudio piloto en mujeres y consiguieron reproducir los cambios observados en el ratón: con solo 12 semanas de tratamiento, se observaron cambios significativos en las mujeres participantes. Mejoraron en los análisis hormonales, la regularización del ciclo menstrual y el recuento de folículos ováricos. “A partir de aquí, deberá investigarse su efectividad y seguridad en grupos más numerosos de pacientes, más allá de 12 semanas y en mujeres con diferentes presentaciones clínicas del SOP (p.ej. en las mujeres con obesidad). Por último, podrá determinarse si se confirman también los efectos positivos en la fertilidad observados en el modelo animal.” aclara la Dra. Casals.
Investigación sobre el SOP en el Clínic
En un estudio reciente, realizado por el Clínic-IDIBAPS, se ha podido observar mejoría en las alteraciones hormonales de las mujeres con SOP y obesidad tras cirugía bariátrica, similares a los observados en la investigación con artemisina. La cirugía bariátrica para el tratamiento de la obesidad conlleva cambios metabólicos radicales en el cuerpo de la mujer, especialmente en las mujeres con SOP. No obstante, los derivados de la arteminisina no han establecido aún su efectividad en la mujer con SOP y obesidad”.
Por otro lado, la Dra. Casals añade que “en el Clínic Barcelona no hemos investigado aún los derivados de la artemisina, pero estamos estudiando el impacto de la suplementación de la mujer con SOP mediante determinadas vitaminas, antioxidantes y probióticos antes de realizar un ciclo de fecundación in vitro, con resultados prometedores.”
Tratamiento actual del SOP
A todas las mujeres con SOP se les recomienda seguir un estilo de vida saludable , tanto para mejorar sus síntomas como para reducir el riesgo cardiovascular y de problemas metabólicos como la obesidad y la diabetes tipo 2.
Los principales tratamientos farmacológicos actuales para el SOP, los anticonceptivos hormonales, la metformina o los fármacos antiandrogénicos, se centran en aliviar los síntomas, pero no abordan la causa del trastorno.
Por este motivo, este estudio con la artemisinina aporta unos resultados iniciales prometedores. La artemisina reduce la producción de andrógenos en los ovarios y, así, aborda un aspecto clave en el desarrollo de este trastorno y supone una alternativa a los tratamientos sintomáticos actuales. Aun así, todavía se necesitan más estudios para confirmar estos hallazgos y determinar la dosis óptima y la duración del tratamiento.
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