Tras la alerta de la iniciativa privada de pérdidas económicas en Sinaloa, sobre todo en Culiacán, por la violencia desatada entre grupos criminales, el Gobierno estatal anunció un plan de apoyo que contempla exenciones temporales de impuestos, descuentos, programas y también créditos.
A dos semanas de la pugna entre facciones del Cártel de Sinaloa (CDS), la cual ha dejado más de 40 asesinatos, la Administración morenista informó sobre el plan emergente para intentar una estabilidad y recuperación económica en la capital estatal.
De entre las medidas fiscales, se precisó que se dará un descuento de 90 por ciento en multas del IMSS; se ampliará hasta fin de mes los descuentos del 85 por ciento en multas y recargos sobre el Impuesto Sobre Adquisición de Inmuebles (ISAI) y predial, y también se exonerará el cobro por el suelo en mercados y estacionamientos hasta diciembre próximo.
"Se garantizará la continuidad en el servicio de agua potable para evitar cortes", se añadió en la información oficial.
Apenas el pasado 17 de septiembre, distintas organizaciones empresariales advirtieron sobre una baja en sus ventas, utilidades, y con ello el peligro en los empleos de miles de personas.
Una de ellas fue la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), cuyo líder Cuauhtémoc Rivera, aseguró que las pérdidas podrían alcanzar hasta el 25 por ciento.
"Calculamos que un pequeño comercio debe ganar al mes no menos de 10 o 12 mil pesos y lo que se está cayendo ahorita son las ventas y la utilidad de una semana, o sea, el 25 por ciento de las ventas", expresó.
"Lo que está viviendo Culiacán es un estado de sitio, un toque de queda autoimpuesto, por el mismo temor de la ciudadanía, en toda la actividad económica y comercial de la capital y zonas conurbadas, unos siete municipios más, en la zona rural de la capital, en algunos municipios ya empieza a haber síntomas de desabasto", alertó.
En respuesta a ésto, se informó sobre un programa de microcréditos en coordinación con el Ayuntamiento de Culiacán.
"Se ofrecen préstamos de hasta 25 mil pesos con condiciones favorables; tres meses de gracia, una tasa fija anual del 9 por ciento, sin necesidad de garantía y con requisitos accesibles", se explicó.
"Se destinaron 100 millones de pesos a través del programa Impulso Nafin, con créditos entre 300 mil pesos y 1.5 millones de pesos, ofreciendo hasta seis meses de gracia, sin garantía y con tasas preferenciales".
También se aseguró que habría un apoyo alimentario, una campaña para incentivar el consumo de productos y servicios locales, un patrullaje constante para evitar la inseguridad, y también garantizar los servicios básicos como recolección de basura, transporte público y operación de guarderías.
Otra de las quejas lanzadas desde el sector empresarial el pasado martes fue la de los restauranteros, con su representante Laura Guzmán Torróntegui, quien dijo que el 80 por ciento de los establecimientos continuaban trabajando con un horario limitado, aunado al desabasto de productos.
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