Justin Timberlake se declaró culpable de un cargo menor en su caso por conducir en estado de ebriedad en Sag Harbor, Nueva York. El tribunal le impuso una multa de 500 dólares y la obligación de realizar entre 25 y 40 horas de servicio comunitario en una organización sin fines de lucro, según reportaron medios estadounidenses.
"No cumplí con los estándares que trato de mantener para mí mismo. Debería haber tenido mejor juicio... Entiendo la gravedad de esto", le dijo Timberlake a un juez en NY, según Associated Press.
La corte ya había suspendido su licencia de conducir. Además, el juez le ordenó hacer un anuncio de seguridad pública, el cual Timberlake cumplió al dirigirse a los medios de comunicación fuera del tribunal. En su declaración, el cantante recomendó no conducir tras consumir bebidas alcohólicas y sugirió opciones alternativas como llamar a un amigo o utilizar aplicaciones de transporte.
"Aunque solo hayas tomado una bebida, no te pongas al volante de un auto. Hay muchas alternativas. Llama a un amigo, toma un Uber. Hay muchas aplicaciones de transporte. Toma un taxi. Este es un error que cometí, pero espero que quienes estén viendo y escuchando ahora puedan aprender de este error. Yo ciertamente lo he hecho", dijo.
El cantante, de 43 años, fue detenido en junio luego de que la policía lo viera desviarse de su carril y no detenerse en una señal de alto. El informe policial señala que Timberlake tenía los ojos inyectados de sangre y vidriosos, y que no superó las pruebas de sobriedad en el lugar. Aunque el cantante declaró haber consumido solo un martini, se negó a realizar una prueba de alcoholemia.
Su abogado, Ed Burke, había sostenido que Timberlake no estaba intoxicado y que no debía haber sido arrestado por conducir en estado de ebriedad. Las autoridades indicaron que los cargos fueron reducidos como suele hacerse en casos de primera infracción y negaron que Timberlake recibiera un trato especial.