México ha desarrollado políticas públicas orientadas a aumentar la cobertura de atención de la salud sexual y reproductiva con visión de prevención y autocuidado, informó el subdirector de Mejoras para la Calidad de la Atención del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH y el Sida (Censida), Daniel Fernando Pérez Larios.
Señaló que el trabajo se orienta a fortalecer la información y el acceso a los servicios médicos; métodos de planificación familiar; anticoncepción y prevención de infecciones de transmisión sexual (ITS), incluidas las hepatitis por virus B y C; y la infección por el virus del papiloma humano (VPH) prevenible por vacunación, para que las y los adolescentes se involucren en el autocuidado de su salud y gocen del ejercicio de su sexualidad de forma segura.
Entrevistado por el Día Mundial de la Salud Sexual, que se conmemora el 4 de septiembre, señaló que se cuenta con servicios amigables de salud sexual y reproductiva para jóvenes menores de 20 años en unidades médicas de primero y segundo nivel.
Bajo lineamientos de privacidad y confidencialidad, estos servicios brindan atención integral de calidad, segura, con calidez y pleno respeto a los derechos humanos y a la diversidad sexual, con enfoque intercultural y de género.
En estos espacios se abordan los componentes de sexualidad y reproducción segura, como anticoncepción, detección y tratamiento de ITS, embarazo no deseado y atención a la salud materna.
Explicó que, en la Secretaría de Salud, las instituciones responsables del cuidado de la salud sexual de la población son Censida y el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva (CNEGSR).
El CNEGSR coordina los servicios amigables de salud sexual y reproductiva y distribuye los métodos anticonceptivos, mientras que Censida se encarga del programa para la prevención y el control del VIH y otras ITS, con el objetivo de garantizar el abasto de insumos para diagnóstico oportuno; capacita a profesionales de la salud y establece lineamientos para tratamientos antirretrovirales, ITS y prevención de este tipo de infecciones.
Censida implementó la estrategia Profilaxis Preexposición (PREP), para la prevención del VIH, la cual consiste en la ingesta diaria y programada de una pastilla (emtricitabina/tenofovir) que previene en el organismo la infección por VIH, lo que disminuye la probabilidad de adquirir la enfermedad en caso de que se exponga al virus.
Cuenta con Centros Ambulatorios para Prevención y Atención en Sida e Infecciones de Transmisión Sexual (Capasits) en todo el país; en su labor participan equipos de psicología, enfermería y trabajo social, quienes también apoyan a familiares.
Como parte de la atención, la población que vive con VIH y no están cubierta por regímenes de seguridad social tiene acceso gratuito al tratamiento antirretroviral.
Informó que, en el último año, a través de los servicios en línea, fueron atendidos más de 27 mil adolescentes, y un millón y medio de personas recibieron información. En los Capasits se realizaron más de 500 mil pruebas de VIH y 467 mil de sífilis, e ingresaron al programa PREP más de 13 mil personas en riesgo de adquirir VIH.
Subrayó que es importante promover y difundir más información sobre salud sexual y reproductiva entre adolescentes, y acercar esta información a escuelas y centros de reunión que frecuenta este grupo de edad.
“Los jóvenes consideran a la sexualidad como algo inherente en la vida, por lo que merecen mayor conocimiento sobre el tema y más participación para prevenir prácticas de riesgo que favorecen embarazos no deseados, así como ITS, principalmente por desinformación.”
Desde hace 14 años, la Asociación Mundial para la Salud Sexual (WAS por sus siglas en inglés), estableció el 4 de septiembre como el Día Mundial de la Salud Sexual, para sensibilizar y promover la sexualidad como un aspecto esencial del ser humano y un elemento de la salud reproductiva que debe ser satisfactorio, saludable y sin riesgos para la población.