El número de los rusos que trabajan desde casa se ha reducido a los niveles previos a la pandemia del coronavirus, según un estudio de la Escuela Superior de Economía rusa, publicado este viernes en el diario Kommersant.
De acuerdo con el informe, la cifra de los ciudadanos que teletrabajan es de cerca un millón de personas, es decir poco más del 1 % del total de los trabajadores.
En 2020 y 2021 el porcentaje de las personas que trabajaban de forma remota se situaba entre el 25 y el 30 % de los rusos, cifra que bajó drásticamente en 2022 para situarse en el 4,2 %.
A finales de 2023 el número de los rusos que no tenían que desplazarse para trabajar era del 1,4 % del total del censo de empleados.
Entre los teletrabajadores actuales uno de cada ocho se desempeña en el sector informático, según se desprende del estudio.
A la vez, los expertos consultados por Kommersant señalan que el pequeño número de los trabajadores a distancia se debe en parte al sistema autoritario de gestión en el que los jefes no comprenden cómo controlar a los que desempeñan sus funciones desde casa.
"El trabajo a distancia suele estar presente en empresas con un enfoque de gestión moderno, que practican directivos relativamente jóvenes”, señaló Vladislav Bijanov, socio de la empresa de recursos humanos Cornerstone.
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