Productores potosinos de cebada se unen contra planta de Heineken

Productores de Puebla, Tlaxcala, Hidalgo, Estado de México, San Luis Potosí y Durango advirtieron que si no hay una respuesta a sus demandas, provocarán el cierre de operaciones.

Y es que bajo la metodología vigente la firma de Grupo Modelo estaría obligada a pagar 8 mil 680 pesos por tonelada de cebada maltera, la materia prima para la producción de cerveza; sin embargo, los agremiados acusaron que apenas les ofrecieron 7 mil 430 pesos, 17 por ciento menos.

Ante esa situación, productores de Puebla, Tlaxcala, Hidalgo, Estado de México, San Luis Potosí y Durango colocaron un plantón y advirtieron que si no hay una respuesta satisfactoria a sus demandas, hacia las 12 horas del viernes 6 de septiembre provocarán el cierre de las operaciones en la planta de Heineken en Rafael Lara Grajales.

Los inconformes entregaron un pliego petitorio a los ejecutivos de la cervecera para advertir el cierre de la planta si no había un cambio al precio de la tonelada de cebada maltera; pero éstos se negaron y ahora piden el apoyo de la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum Pardo.

Los inconformes dijeron que "Ellos son empresas trasnacionales y se están llevando nuestra agua, lo mínimo que deberían de hacer es comprarnos nuestra cebada a un precio justo".

De acuerdo con datos de la Sader, el negocio de la cebada en México es el sustento para más de 25 mil familias que producen en pequeña y mediana escala en una superficie de 235 mil hectáreas en la zona centro del país, que incluye a Hidalgo, Tlaxcala, Puebla y Estado de México, así como entidades del norte como Durango, San Luis Potosí y Zacatecas.

Actualmente México ocupa el lugar 31 en la escala mundial de países productores de grano de cebada utilizado para la elaboración de cerveza, lo que equivale a 0.6 por ciento de la producción global.