El cáncer de cuello uterino, también conocido como cáncer de la matriz, es el crecimiento anormal de células en la parte inferior del útero que se conecta a la vagina. Este tipo de cáncer es el cuarto más frecuente en mujeres a nivel mundial y el más común en mujeres con Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
Es una de las principales causas de muerte entre mujeres globalmente. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que más de 600,000 mujeres son diagnosticadas anualmente con esta enfermedad y aproximadamente 340,000 mueren a causa de ella. En México, el principal factor de riesgo es la infección persistente por el virus del papiloma humano (VPH).
El VPH es un virus comúnmente transmitido por contacto sexual que puede causar cambios celulares en el cuello uterino, los cuales, si no se detectan y tratan a tiempo, pueden evolucionar hacia un cáncer. La prevención del cáncer cervicouterino se basa en dos pilares fundamentales: la vacunación contra el VPH y el tamizaje regular. En San Luis Potosí, en 2023, se realizaron un total de 17,498 pruebas de citologías y de VPH. Para 2024, se contará con más de 21,000 pruebas de VPH, que beneficiarán a la población.
Los factores de riesgo para el cáncer de cuello uterino incluyen tener muchas parejas sexuales, comenzar la actividad sexual a temprana edad, haber padecido anteriormente Infecciones de Transmisión Sexual (ITS), fumar, y tener el sistema inmune debilitado por alguna enfermedad o medicamento.
Las acciones efectivas para la prevención incluyen:
- Vacunación contra el VPH para niñas de quinto año de primaria y/o niñas de 11 años no escolarizadas, con una dosis única.
- Vacunación para mujeres y hombres cisgénero y transgénero entre 11 y 49 años que viven con VIH, con un intervalo de 0-2-6 meses.
- Vacunación para niñas y adolescentes de 9 a 19 años atendidas dentro del protocolo de violación sexual sin antecedentes previos de vacunación contra el VPH.
Las mujeres de 25 a 34 años deben hacerse una prueba de Papanicolaou cada 3 años, si las 2 primeras fueron negativas. Las mujeres y hombres trans de 35 a 64 años deben hacerse una prueba de VPH. Las mujeres vacunadas contra el VPH deben seguir las recomendaciones sobre pruebas de detección para su grupo de edad. Para las personas sexualmente activas, la doble prevención con el uso de condón femenino y masculino puede reducir la posibilidad de contraer enfermedades de transmisión sexual, incluyendo el VPH. Acude a tu unidad de salud más cercana para realizarte la prueba; es rápida y gratuita.
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