Por decisión dividida de 3 a 2 de su Junta de Gobierno y pese a un repunte de la inflación general en julio y a sus expectativas, el Banco de México (Banxico) recortó en un cuarto de punto su tasa de interés objetivo a 10.75 por ciento.
"Este recorte de la tasa de interés, pues creo que puede ser riesgoso porque el Banxico podría empezar a perder reputación y esto es importantísimo, porque uno de los canales principales de transmisión de la política monetaria en México son las expectativas", señaló Gabriela Siller, de Banco Base.
Añadió que la volatilidad del tipo de cambio, con un dólar que ha subido sobre los 19 pesos, y el alto déficit presupuestario podrían provocar mayores presiones sobre la inflación.
Aparte, analistas de Citibanamex consideraron que el recorte a la tasa de interés, en medio de una inflación creciente, es una decisión "inconsistente".
Ayer por la mañana, antes de que el Banxico anunciara su decisión de política monetaria, el Inegi reportó que en julio la inflación general resultó de 5.57 por ciento a tasa anual, la mayor desde mayo del 2023, cuando fue de 5.84 por ciento, y ligando cinco meses de crecimiento.
Sólo en el séptimo mes del año, respecto a junio, fue de 1.05 por ciento, la más elevada en 32 meses, impulsada principalmente por los precios de frutas y verduras que forman parte del componente no subyacente del indicador general.
En su comunicado sobre su decisión, el Banxico envió la señal de que lo hizo porque la inflación subyacente -aquella que elimina los precios de productos volátiles, como los del campo, y que marca la tendencia general- ligó en julio 18 meses de desaceleración, al ubicarse en 4.05 por ciento.
Además, anotó que la reducción de la tasa se realizó en un contexto de una baja en la actividad económica.
Para Citibanamex, dado el tono del comunicado, la Junta de Gobierno del Banxico podría hacer recortes continuos de 25 puntos base en las tres reuniones que le quedan en el año, para cerrar en 10.00 por ciento.
Por el contrario, Alejandro Saldaña, de Grupo Financiero Bx+, consideró que un panorama incierto en la inflación, volatilidad financiera y una Fed "más paciente" cierran el margen de maniobra para que el Banxico realice muchos recortes.
"La inflación se ha acelerado y si bien estimamos que un menor crecimiento económico ayudará a que ceda en adelante, su panorama enfrenta diversos riesgos, por lo que elevamos nuestro pronóstico para el cierre de año a 4.9 por ciento", expuso en un análisis.
Por ello, Bx+, pese a la sorpresiva baja de ayer, mantuvo su pronóstico para la tasa objetivo en 10.50 por ciento al cierre del 2024.
El propio Banxico elevó de 4.0 a 4.4 por ciento su pronóstico de inflación anual para el cuarto trimestre del 2024 y aun así recortó su tasa.
Al Banxico le restan aún tres ocasiones calendarizadas en el resto del año para decidir si hace cambios a su tasa, en septiembre, noviembre y diciembre.
Se adelanta a decisión de la Fed
La mayoría de los analistas esperaba que el Banxico no hiciera el recorte a su tasa que anunció ayer, sino hasta después de que lo hiciera la Reserva Federal de Estados Unidos en su reunión del 18 de septiembre.
El martes, tras la sacudida global de los mercados financieros del lunes, Citibanamex difundió una encuesta de expectativas de entre 33 instituciones financieras de las que 18 esperaban el recorte hasta septiembre.
Pero en la semana, dada la inquietud que causó un reporte en Estados Unidos sobre una creciente tasa de desempleo, en el CME (que ya daba por descontado que en septiembre la Fed recortaría su tasa en un cuarto de punto) las apuestas se volcaron a que lo hará en medio punto el próximo mes.
"Esto pudo abrir la puerta en el Banxico de optar por el recorte de 25 puntos base que anunció hoy (ayer)", señaló un analista.
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