Altos funcionarios del Gobierno turco criticaron duramente a Estados Unidos este jueves por permitir que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, hablara ante el Congreso en Washington, calificándolo como "una vergüenza para la humanidad" y una amenaza para los valores humanitarios y la democracia.
"El grupo que aplaudió de pie a un perpetrador de masacres juzgado en tribunales internacionales, pisoteando todos los derechos humanos, la democracia y la justicia en nombre de la humanidad, ha quedado grabado en la memoria colectiva como cómplices de esta masacre", subrayó el presidente de la Gran Asamblea Nacional de Turquía, Numan Kurtulmus.
A esta crítica se sumó el vicepresidente turco, Cevdet Yilmaz, que considera la invitación a Netanyahu al Congreso estadounidense por parte del Partido Republicano como "preocupante para el futuro de los valores humanitarios, el derecho internacional y la democracia".
"La historia nunca olvidará la opresión de los tiranos y aquellos que aplauden a los opresores que matan a niños. Lo que sucedió es una escena vergonzosa para la humanidad", manifestó el ministro del Interior, Ali Yerlikaya, en redes sociales.
El ministro de Justicia, Yilmaz Tunç, reiteró lo vergonzoso que resulta para Turquía el discurso del mandatario israelí, a quien acusó de "haber matado a más de 40.000 civiles inocentes, incluidos niños, mujeres, jóvenes y ancianos desde el 7 de octubre".
Los funcionarios turcos afirmaron que "continuarían defendiendo el Estado de derecho, al pueblo palestino oprimido y ocupado, abogando por la justicia y la paz para todos".
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