Se le conoce por varios nombres, chiltepín, piquin o chipitin y es considerado el segundo chile más picante de México. Es muy apreciado por tener la curiosa característica de agregar la cantidad justa de picor a los platillos sin cambiar su sabor, por ello no puede faltar en cada comida sinaloense, ya sea en mariscos, caldos o guisados.
También, es apodado como el oro rojo, no solo por su preciado sabor, sino también por no dejarse cultivar tan fácilmente, se da a desear, pues, y vaya que todos lo queremos. Existe la creencia que para poder cultivarlo y que tenga su sabor característico, se tiene que hacer de forma silvestre, en un proceso donde las aves consumen el fruto y esparcen las semillas por medio de sus heces.
También, se cree que el chiltepín tiene propiedades curativas, tanto para sanar el cuerpo como el espíritu, se usa como remedio natural para aliviar dolores de muela, de oído, reumas, calentura, gripa, tos o incluso el mal de ojo. Pero nuestro uso favorito es para curarnos la curda, pues no hay como un buen aguachile con mucho limón y chiltepín para levantar hasta a los muertos.
Y ojo, si pruebas este chile te recomendamos usar un chiltepinero, el moledor especial para chiltepín, que te ayudará a evitar andar enchilado por varios días.
Seguro ya se antojó, lo bueno es que ya no tendrás que buscarlo en el monte, hoy en día es fácil encontrarlo disponible a la venta en tiendas o incluso Comprarlo en línea para que te llegue directo a casa.
Sabemos que hay chiles a chiles, nosotros te recomendamos probar La Privera, con el auténtico sabor del chile chiltepín de la sierra sinaloense, con ellos podrás encontrar el chile seco, entero o ya molido, listo para disfrutar.
