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Dicen priistas que amagos de Alito no frenarán impugnaciones

Agencia Reforma | 24/07/2024 | 09:29

Los amagos de expulsión no van a detener las impugnaciones contra el intento de Alejandro Moreno de reelegirse en el PRI, advirtieron militantes inconformes con los cambios estatutarios y la apresurada convocatoria para renovar la dirigencia.
 
 Respondieron que la crítica interna, la diferencia de opiniones y la decisión de defender al partido no son violaciones al código de ética del partido.
 
 Dulce María Sauri y Enrique Ochoa, ex presidentes del PRI, así como Fernando Lerdo de Tejada y Aurelio Nuño, quienes han promovido diferentes quejas en el Tribunal Electoral y el INE, alertaron que la actitud de Moreno Cárdenas lo único que genera es un mayor descrédito ante la opinión pública y ahonda el riesgo de una pérdida del registro en el 2027.
 
 Ayer, Alejandro Moreno dijo que se preparan las expulsiones de quienes son traidores y se han "rendido" al poder por impugnar su reelección.
 
 "Estoy comprometida con la defensa del partido. Callar, sufrir, soportar, esperar a que cambie un día la situación, a que suceda el milagro, para que un día de elecciones el PRI no alcance el porcentaje mínimo y pierda el registro, no es mi papel como de esposa sufrida.
 
 "Seguiré con los procedimientos para defender al PRI, siento que no he infringido ninguna disposición del Código de Ética partidaria", manifestó Dulce Maria Sauri, ex presidenta del partido.
 
 Dijo que desde que un grupo de militantes tomó la decisión de levantar la voz y hacer frente a Moreno Cárdenas en su intento por controlar al PRI y llevarlo a la extinción, sabían que estaban expuestos a procesos de expulsión.
 
 "Finalmente está logrando Moreno tener más priistas fuera del PRI que dentro del PRI. Asumo que la primera responsabilidad a desempeñar de un dirigente del PRI es hacer esfuerzos siempre, siempre, más allá de nuestras propias fuerzas, a mantener la unidad del partido y la cohesión de militantes, porque cada uno es importante y hay que luchar para no perderlos", resaltó.
 
 En cambio, dijo, con la dirigencia que busca la reelección hay una epidemia de expulsiones, hasta de los que ya renunciaron.
 
 Indicó que enfrentará un proceso de expulsión si es necesario y acudirá al Tribunal Electoral a declamar sus derechos de militante.
 
 "El silencio es forma de complicidad, de tolerancia a los abusos, es una forma de complicidad, no es cierto que sea disciplina, y tal vez debimos actuar más fuerte desde el 2020", señaló.
 
 Enrique Ochoa, ex director de CFE, dijo que los partidos existen como una expresión de pluralidad política, pero si la dirigencia persigue a quienes piensan distinto, lo destina a desaparecer.
 
 "Un dirigente que expulsa a quienes piensan distinto a él, está destinado a quedarse solo. Aquel dirigente que inhibe y castiga la diversidad de ideas, le corta las alas al partido y lo destina a desaparecer", consideró Ochoa Reza.
 
 Consideró que Alejandro Moreno debería de reflexionar si lo que está haciendo es conveniente para el partido o solo para él, porque quien se beneficia con su reelección, es él mismo y los dirigentes locales que también se quedarán en sus cargos.
 
 "Si él tuviera el más elemental sentido de responsabilidad, estaría pensando en expulsarse a sí mismo del partido, en lugar de amenazar a quienes, sin ningún interés de por medio, están levantando la voz, pensando en lo que sea mejor para el partido, para evitar su secuestro", sostuvo.
 
 También dijo que aunque los expulsen, los recursos de inconformidad seguirán legalmente su curso, porque se presentaron por militantes del partido con vigencia de derechos.
 
 Fernando Lerdo de Tejada opinó que es un error de Alejandro Moreno combatir a los críticos de su dirigencia, porque en un partido político debe haber espacios abiertos para la discusión, la reflexión, el intercambio de ideas y el debate.
 
 "Alejandro Moreno quiere un partido cerrado. ¿Cómo puede avanzar el PRI sin escuchar siquiera a sus críticos internos? ¿Cómo va a escuchar a una sociedad tan diversa como es la nuestra?
 
 "Alejandro Moreno debería tomar otra actitud. Debería tomar una actitud de abrirse al diálogo, permitir contrastar puntos de vista, intercambiar ideas, es un grave error", estimó.
 
 Dijo que la actitud de Moreno le recuerda al PRI de los 80, dirigido por Jorge de la Vega Domínguez, cuando expulsó a Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo e Ifigenia Martínez miembros de la Corriente Democrática.
 
 "Entonces se negó el partido a escuchar a esas voces que pensaban diferente y desde luego los resultados históricos están ahí para evaluación de la ciudadanía.
 
 "Y es inentendible que un dirigente de un partido amague así cuando lo que aspira es volver a dirigirlo. Eso te demuestra que quiere un partido completamente cerrado. No de militantes, sino de súbditos. Eso es lo que él quisiera y está equivocado", aseveró.
 
 Aseguró que seguirán con las gestiones ante autoridades electorales para que sean invalidadas las reformas ilegales que permiten la reelección de Alejandro Moreno y se genere un proceso democrático en la renovación de la dirigencia.
 
 Aurelio Nuño, ex Secretario de Educación, consideró que Alejandro Moreno sigue en su "delirante marcha" hacia la locura luego de amagar con expulsiones.
 
 "Ahora se apresuran a fundar una tiranía microscópica. En la periferia del poder, construyen una pequeñísima aldea absolutista en donde la libertad de expresión se convierte en un delito imperdonable.
 
 "Desde su minúsculo despotismo prepara una purga tanto de los militantes libres como de su vocabulario: las palabras criticar, disentir y proponer serán ahora expulsadas de la pequeña aldea. Solo los aplausos y los elogios al 'micro-tirano' serán permitidas. Están, por lo mismo, ensayando una tiranía del ridículo", aseguró.
 
 Nuño afirmó que pese a las amenazas, van a continuar con las impugnaciones y con su lucha.
 
 Alertó que sería grave que en el INE y TEPJF se permita la reelección de Alejandro Moreno en el PRI, porque se abrirá por la puerta de atrás el aval legal a las autocracias, por pequeñas que sean.
 
 "Hemos presentado impugnaciones ante las autoridades electorales para que, con la ley en la mano, detengan la incrustación de un pequeño sultanato en nuestra democracia", defendió.