En apoyo a la salud de la población y para evitar riesgos sanitarios, la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (COEPRIS) realiza de manera permanente la vigilancia y control sanitario de productos catalogados como auxiliares al manejo de alguna enfermedad, reductores de peso, suplementos alimenticios o de uso cosmético, con el fin de detectar la venta de “productos engaño”.
Los productos engañosos son aquellos que prometen falsamente regenerar, rehabilitar y/o curar enfermedades, mejorar la apariencia física, reducir peso, potenciar el deseo sexual, o cualquier otra cualidad atribuida de manera ilegal e irresponsable. Es común que estos productos se publiciten exagerando sus características curativas o de rehabilitación y, muchas veces, no declaran al cien por ciento su composición, lo que se traduce en un riesgo para la salud de quien los consume.
Por otro lado, los suplementos alimenticios son productos elaborados a base de hierbas, extractos vegetales, alimentos tradicionales, deshidratados o concentrados de frutas que pueden estar o no adicionados con vitaminas o minerales. Su uso debe ser exclusivamente para incrementar la ingesta dietética total, complementarla o suplir alguno de sus componentes. Bajo ninguna circunstancia, estos productos deben aludir a prevenir, curar o rehabilitar enfermedades, cambiar la apariencia física o bajar de peso, ya que con ello se estarían catalogando como productos engaño.
COEPRIS ha reforzado la vigilancia de la publicidad de suplementos alimenticios y productos para bajar de peso tanto en medios de comunicación tradicionales como en redes sociales. De enero a la fecha, en coordinación con la Policía Cibernética y COFEPRIS, se han eliminado 134 enlaces con publicidad engañosa de productos engaño y se han suspendido 5 medios impresos como volantes y carteles que contenían publicidad irregular.
Como resultado de las actividades de vigilancia y control sanitario de enero a julio, se ha logrado la destrucción de 217 piezas y 8 kilos de productos engaño por mal etiquetado, alusión a un uso terapéutico (cura o rehabilitación) o por ser parte de una Alerta Sanitaria emitida por COFEPRIS de suplementos que, por algún ingrediente, representan un riesgo a la salud.
COEPRIS recomienda a la población que adquiera suplementos alimenticios observar que el etiquetado del producto no contenga imágenes, indicaciones o declaraciones relacionadas con la cura, prevención o tratamiento de alguna enfermedad o la reducción de peso. El etiquetado debe incluir la tabla nutrimental, fecha de caducidad, lista de ingredientes, fecha de elaboración, datos del fabricante y la leyenda de que el producto no es un medicamento. Bajo ninguna circunstancia, un suplemento alimenticio debe contener la leyenda “Notificado ante la SSA”, “Producto elaborado bajo las normas de COFEPRIS”, “Producto autorizado ante la SSA” o “Autorización en Trámite por COFEPRIS”. El uso de suplementos alimenticios debe ser recomendado por un especialista y en ningún caso se debe abandonar un tratamiento médico por el uso de algún suplemento.
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