La Administración de Enrique Alfaro heredará a la de Pablo Lemus un incremento de 59 por ciento en la deuda pública directa, obras inconclusas como la Línea 4 y varias crisis en materia de seguridad, como la desaparición de personas.
El monto de la deuda directa que dejará el Gobierno alfarista será de alrededor de 28 mil 865 millones 914 mil 279 pesos. Ese es el monto que debía el Poder Ejecutivo estatal tanto a la banca comercial como a la banca de desarrollo hasta el 30 de junio del 2024, de acuerdo con la página de transparencia de la Secretaría de la Hacienda Pública.
La deuda directa que recibió Alfaro del priista Aristóteles Sandoval en 2018 fue de 18 mil 192 millones 771 mil 109 pesos.
Sumando la deuda directa con la deuda contingente y la deuda de otros entes públicos (financiamiento a corto y largo plazo a municipios, entre otros) el monto global de los pasivos públicos de Jalisco asciende a 35 mil 862 millones 963 mil 578 pesos, 29 por ciento más que los 27 mil 770 millones 950 mil 483 pesos de inicios del sexenio.
Aunque Alfaro ha dicho que dejará terminada la construcción de la Línea 4 del Tren Ligero, a la próxima Administración le tocará continuar con las pruebas y certificaciones, así como con el arranque de la vía hacia Tlajomulco.
Otra obra de transporte que ofreció construir Alfaro y que tendría que ejecutar la siguiente Administración es el BRT hacía el aeropuerto, así como comprar más vagones para el Tren Ligero.
Otra magna obra que inició en este sexenio y tendrá que ser terminada por el próximo Gobernador es el Hospital Civil de Oriente, que dará servicio a alrededor de un millón de personas. La torre A del inmueble ya fue concluida y está en proceso de ser equipada, mientras que los trabajos en el edificio B continúan.
En materia de seguridad, Alfaro dejará a Jalisco como primer lugar en desapariciones. De acuerdo con el Registro Estatal de Personas Desaparecidas, en la Entidad están reportadas 15 mil 21 personas bajo esa condición.
¿Por qué falló el Gobierno?
Las obras sin terminar, el aumento de la deuda pública y la desaparición de personas, entre otros problemas, se deben al desmantelamiento de instancias que antes funcionaban y a la concentración de poder que ha caracterizado al sexenio alfarista, de acuerdo con el análisis de Jesús Ibarra, académico del ITESO.
Aseguró que la captura del Poder Judicial, de la Comisión Estatal de Derechos Humanos y del Sistema Estatal Anticorrupción ha generado incapacidad y falta de exigencia en la gestión pública.
"El incumplimiento de compromisos como la reforma 'Fiscalía Que Sirva' o la desatención a las policías municipales es una causa directa de las desapariciones y la pérdida de control territorial, con el consiguiente aumento de la violencia", dijo.
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