La Voz de... Estar bien no es ser feliz todo el tiempo

La vida moderna es un continuo sistema de estímulos

Rosalinda Ballesteros Valdés, directora del Instituto de Ciencias del Bienestar Integral de Tec Millennium señaló que estas materias son una herramienta de vida para las personas, ya que les enseña técnicas que anteriormente eran naturales por el estilo de vida, sin embargo, en la actualidad tienen que ser aprendidas debido a que la vida moderna consiste en un continuo sistema de estímulos.

Explicó que “Llamamos bienestar cuando los estados de felicidad se mantienen en el tiempo, lo que no significa que las personas tienen que estar felices todo el tiempo, porque finalmente hay situaciones en la vida que son tristes, que son desagradables, es parte de la experiencia de vida, pero cuando podemos recuperarnos rápido de esas adversidades y mantener los estados positivos de manera sostenida, le llamamos bienestar”.

Ya le llaman ‘Generación Ansiosa’

Ballesteros Valdés dijo que “Yo veo ahorita a los jóvenes como con un impacto a esas generaciones que están entre los 15 y los veintitantos años, como en un impasse entre lo que pasó ya y lo que viene, pero sin embargo resisten mucho menos los problemas y las frustraciones y esto también nos provoca una infelicidad o un malestar más continuos y más rápidos”.

Y es precisamente esto, dijo, lo que se puede resolver con las Ciencias del Bienestar Integral.

Agregó que “Estas poblaciones más jóvenes, quienes tienen 18, 20 años o incluso menos, hay estudios que nos indican que es una generación, y así la hemos bautizado, como una generación ansiosa”.

Explicó que “El filósofo psicólogo Jonathan Haidt, ha estado recuperando toda la información que hay de cómo se están expresando estas diferencias generacionales que hacen que las personas presenten más casos de ansiedad”.

La profesionista consideró que mucho tiene que ver “Y es interesante cómo funcionan nuestros neurotransmisores, y el hecho de que las generaciones más jóvenes, que nacieron ya en un mundo digital, están acostumbradas a estar estimuladas todo el tiempo”.

Antes no se conocía el circuito del placer

Para Rosalinda Ballesteros, “El diseño, por ejemplo, de las redes sociales, de los videojuegos, de los vídeos cortos que ahora están muy en uso, es el estar continuamente generando dopamina, que es una de las hormonas que está relacionada con sentirnos bien, pero específicamente con el placer”.

Consideró que “Este circuito del placer, que en el pasado no vivíamos, porque no teníamos la aceleración de los circuitos de dopamina, entendíamos que una vez que lográbamos algo y obteníamos esa recompensa emocional, iba a caer la dopamina y después volvía a subir”.

Sin embargo, detalló, ahorita esas subidas son muy rápidas, y es lo que genera que todo el tiempo los jóvenes si no están continuamente estimulados, estén desinteresados, aburridos y se dan estas dinámicas.

El estado natural es la calma y serenidad

Ballesteros Valdés señaló que “El estado natural de la biología humana es la calma, la serenidad y tenemos que aprender a regresar y a cultivar esos estados de serenidad”.

Dijo también que “Se pueden resolver los grandes temas que tenemos si aprendemos a modular nuestras propias respuestas emocionales, que están ahí los químicos que nos hacen sentir bien, la dopamina, la serotonina, las endorfinas, la oxitocina, que son sustancias que estamos produciendo todo el tiempo, al igual que las que nos hacen sentir estrés, la adrenalina y el cortisol, pero que son parte de quien somos, de nuestra biología”.

Advirtió que los seres humanos “Tenemos que aprender a que estas respuestas de dopamina no sean picos y bajadas, sino que sean más bien ondas y que entendamos que no todo el tiempo podemos estar estimulados a tope, porque es lo que nos generan los problemas de ansiedad”.